A pesar de las reformas legales realizadas en años recientes en materia de migración, las autoridades mexicanas “siguen actuando como si el tránsito indocumentado por el país fuera un delito, además de que mantienen detenidos ilegalmente a menores de edad y obstaculizan la regularización de las personas que quieren quedarse”.

Denunció lo anterior Manuel Ángel Castillo García, profesor-investigador de El Colegio de México, quien lamentó que la infancia migrante, en particular, sigue expuesta a múltiples abusos durante su estancia en nuestro territorio, debido a la falta de políticas públicas en la materia.

En el contexto de la Cátedra Jan de Vos: diálogos fronterizos y transfronterizos, organizada por El Colegio de la Frontera Sur y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, el experto lamentó que en México sigue existiendo una brecha muy grande entre las normas y su aplicación.

Recordó que en los primeros meses del actual gobierno hubo un cambio en el discurso hacia la migración indocumentada, en el contexto del cual las autoridades se dijeron conscientes de que se trataba de una población que requería ayuda y, por tanto, ya no sería criminalizada, pero eso se modificó muy rápido con las presiones económicas de Estados Unidos.