La alcaldía Iztapalapa comenzó a ejecutar una serie de acciones para abatir la violencia contra las mujeres, entre las cuales están la entrega de los primeros dijes con botón de auxilio y la inauguración de las Puertas Violetas, lugares de atención y acompañamiento para víctimas de agresiones.

En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres, la alcaldesa Clara Brugada informó que su gobierno desarrolla diversos programas para garantizar la tranquilidad de la población femenina en la vía pública y dentro de sus viviendas, “porque Iztapalapa, al ser la demarcación más poblada, es también la que tiene mayor incidencia de agresiones a niñas y mujeres”.

Al referirse a los dijes, explicó que es un botón de auxilio que se entregará a quienes estén en riesgo de una agresión en su vivienda o en la calle.

Cuando una mujer activa el botón del dije se envía una señal al teléfono celular y a través de éste se lanza una alerta a dos familiares y a la Base Cuitláhuac de la alcaldía, que de inmediato enviará una patrulla para que verifique si se necesita apoyo.

En las pruebas que se hicieron para el funcionamiento de la aplicación, Brugada afirmó al secretario de Gobierno, David Cervantes, que se ubicó a las víctimas entre 7 y 14 minutos por medio del sistema satelital de posicionamiento en el transporte público o en un domicilio.

Indicó que este es un mecanismo de auxilio eficiente en distintos aspectos respecto de otros que se han aplicado: es discreto y silencioso y puede activarse sin que el agresor lo detecte.

Sobre las Puertas Violetas, la alcaldesa manifestó que operarán en las 10 instalaciones de Utopía que se abrirán en la demarcación y en ellas se dará orientación legal, sicológica, acompañamiento y recreación a las mujeres víctimas de violencia antes de ser canalizadas a esos inmuebles

Las estrategias están ligadas al programa Siemprevivas, que realiza Iztapalapa desde hace tres semanas, por medio del cual 230 profesionistas acuden a las viviendas de 10 colonias y unidades habitacionales con mayor índice de violencia hacia las mujeres y con agresiones en el ámbito intrafamiliar para identificar a las víctimas y los delitos que se cometen en esos hogares.