

Miércoles 16 de abril de 2025, p. 4
Madrid. Los restos del escritor Mario Vargas Llosa, quien falleció el domingo en Lima, Perú, a sus 89 años, fueron incinerados en una ceremonia íntima, con la presencia de sus familiares y amigos más cercanos, informan medios locales.
De esta manera, la familia cumplió con su última voluntad. Medios locales fotografiaron a sus hijos a la salida del crematorio y mostraron cómo Álvaro y Gonzalo Vargas Llosa llevaban dos urnas.
En los exteriores del inmueble se congregaron representantes de medios de comunicación y algunos admiradores que quisieron acompañar simbólicamente el último trayecto del escritor arequipeño, según el diario El Comercio.
Horas antes de la incineración, Álvaro Vargas Llosa agradeció las muestras de afecto a su padre y pedía que respetaran la privacidad. Hemos acordado tratar de llevar este duelo en la intimidad, por eso estamos velando a mi padre en casa, en lugar de hacerlo en un lugar público
, comentó al periódico El Peruano.
El Gobierno de Perú declaró un día de duelo nacional en memoria del intelectual, y Arequipa, su ciudad natal, lo amplió a dos días.
España otorga reconocimiento póstumo
En tanto, el gobierno de España concedió de manera póstuma al escritor la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio.
Vargas Llosa ha sido un escritor referente de la literatura contemporánea
, indicó el Ministerio de Educación español en un comunicado. El galardón reconoce los méritos de sus receptores en el campo de la educación, la ciencia, la cultura, la docencia o la investigación.
Su vasta obra, con cerca de 70 títulos, entre novelas, cuentos, ensayos y dramaturgia, le valió ser merecedor del Premio Cervantes 1994, además de otros reconocimientos destacados como el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1986 y el título de marqués de Vargas Llosa que en 2011 le concedió el rey emérito Juan Carlos.