
Lunes 10 de marzo de 2025, p. 3
Tultepec, Méx., Un momento alegórico del surrealismo mexicano se vivió la tarde del sábado en la Pamplonada pirotécnica de Tultepec, en la que más de 200 figuras monumentales de toros hechos de cartón, papel y estructuras metálicas, caracterizando personajes y revestidos de cohetes, desfilaron por las calles en honor de San Juan de Dios, santo patrono de los pirotécnicos.
En esta fiesta, única en el mundo, la imaginación y la creatividad están presentes al caracterizar a los toros, y su folclor devino verdadero carnaval para el gozo de miles de asistentes.
Una a una, las enormes figuras pirotécnicas desfilaron por el centro de Tultepec, abriéndose paso entre la multitud con el propósito de agradecer y pedir por un año próximo de trabajo y protección para las miles de personas que viven de la pirotecnia en el municipio mexiquense.
La tradición ha trascendido de generación en generación, y en esta ocasión fueron los más jóvenes que en cientos recorrieron casi tres kilómetros para estar presentes en la Pamplonada pirotécnica.
Con meses de antelación, las familias se organizan para diseñar los monumentales toros y ofrecerlos a San Juan de Dios en su día.
El sábado pasearon por Tultepec toros en forma de personajes de anime, caricaturas, series y películas, de figuras geométricas y de los populares muñecos Labubus, así como de caballos de Troya, tigres y diablos, entre otros.
Uno de los toros más festejados por los asistentes fue el de Cibernético, creación de José Roberto Salado Gómez, del Barrio de la Piedad de Tultepec.
“Nuestro toro es una ofrenda a nuestro santo patrono San Juan de Dios. Como pirotécnicos ya tenemos 19 años participando. Salimos a pedir a nuestro santo que nos dé salud para seguir haciendo este arte.
Tardamos varios días en armarlo; somos un grupo de unas 20 personas y somos de varias familias que nos unimos para participar
, dijo.
Otro de los toros que desfilaron fue el de la figura de Ávatar, cuyos creadores, Omar Valenzuela y Edmi Estrada, emplearon más de tres meses para su elaboración. La figura de casi siete metros de alto fue revestida de cartón, herrería y estructura, acompañada por cientos de cohetones.
“Para nosotros es un orgullo participar cada año; hacemos obras de arte. Mi hija y yo diseñamos el toro; queríamos que fuera de Ávatar, algo distinto con colorido, y que tuviera movimiento. El proceso de elaboración del toro fue de tres meses; trabajaron en él herreros, personas para forrar el entorno, coheteros y pintores, un gran equipo de 30 personas”, expresaron.
Jonathan y Emanuel de los Santos hicieron el toro Pokemon. Llevamos 16 años participando; es una ofrenda para San Juan de Dios. El toro significa el trabajo de los pirotécnicos. Tardamos dos meses y medio en hacerlo. El esqueleto es de alambrón con base de viga, forrada y cargada de cohetes. Es una tradición que no se debe perder
.
Para el joven Kevin Mendoza, ésta fue su primera Pamplonada. Salimos para seguir la tradición; este es el primer año que vengo y es bonito. Nos tardamos un mes en hacer el toro; decidimos hacerlo de Labubu
.
A su paso, los silbidos, aplausos y gritos de ¡vuelta!, ¡vuelta!
hacían que los creadores giraran en repetidas ocasiones las figuras monumentales.
Los toros iban acompañados por música de banda y sonidos móviles, así como de decenas de jóvenes que, bebida en mano, vitoreaban a los astados de fantasía.
Ya en la noche, los toros fueron quemados en los terrenos de la feria, donde los más osados bailaban y driblaban las bolas de fuego.
La Pamplonada pirotécnica se llevó a cabo a la par de la Feria Internacional de la Pirotecnia que se realiza en Tultepec.