La novela Cartas para Lluvia, del escritor toluqueño Alberto Chimal, con ilustraciones de Isidro R. Esquivel y editada por Akal, narra los retos a los que se enfrenta una niña que imagina los destinos en el mundo desde los cuales le escribe su padre, de quien está alejada.

La obra se acaba de presentar en la 46 edición de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, que concluyó el domingo.

En entrevista con La Jornada, el escritor reveló que esta historia se originó luego de un sueño: Para mí, como escritor, ha sido muy interesante y gozoso que estas historias no sean continuas. Mis universos son hechos al vuelo, pero me encanta ver que son compartidos.

El padre de Lluvia, la protagonista de esta novela, es un viajero que trabaja haciendo reportes sobre los lugares que visita. Es en uno de esos viajes que conoce a Nieve, con quien posteriormente tendrá una breve relación y de la cual nacerá la niña.

Horacio Kustos, progenitor de Lluvia, fue el personaje principal de otra novela de Chimal. En esa historia relata las travesías de este explorador que se dedica a recorrer el mundo.

Según el escritor, le gusta que sus historias no hay que leerlas todas, porque no son como las sagas, sino que pueden flotar por si solas. Las considero un archipiélago de historias. Asegura que cualquiera que se acerque a su trabajo puede encontrar en él capas de casi todos mis textos.

En este nuevo volumen, Lluvia, quien no conoce a su padre, sólo puede revivir su recuerdo a través de las cartas que le manda. Me había quedado con la idea de escribir algo con un personaje de nombre Lluvia, derivado de un sueño. Es curioso, porque cuando desperté se me quedó grabado en la cabeza, se quedó conmigo mucho tiempo, comentó Chimal.

Discriminación doble

Nieve y Lluvia padecen un trato discriminatorio por venir de una zona rural y por ser una familia de sólo madre e hija. Este aspecto está basado en la vida familiar del autor, quien fue más cercano a su familia materna. Esto invita al lector a reflexionar sobre las condiciones de cada persona, sin importar sus orígenes.

Muchos temas de este libro los vi de cerca: crecí sin figura paterna, en una familia de mujeres; entonces, fue muy personal para mí enfrentar el prejuicio de no vivir con mi padre. Es complicado y eran asuntos que me preocupaban cuando era niño, compartió el autor.

En la historia, a pesar de que es cercana la relación con su madre, Lluvia se siente incompleta sin su papá. Incluso, en algún momento piensa que las cartas son una ficción y que es Nieve quien las manda para hacerla sentir mejor.

Las ilustraciones, realizadas por Isidro R. Esquivel, logran capturar el viaje imaginario de Lluvia a través de las descripciones de las cartas de su papá, algo que destacó Alberto Chimal.

Me encantó el trabajo de Isidro; me quedé con la imagen grabada donde están Lluvia y su amiga Cathy, luego de una pelea que tienen con otras niñas de su escuela. Me parece que supo leer todo lo que una niña de esa edad puede imaginar con esas cartas, apuntó.

Finalmente, Alberto Chimal ve en Cartas para Lluvia un bálsamo ante la intolerancia que se agudiza en la actualidad.

A pesar de que estamos en una época en la que se reafirman muchos prejuicios y odios, me da gusto saber que también podemos encontrar empatía y entendimiento de personas que parece que no nos van a comprender. Esa es la gran invitación de este libro, concluyó el escritor.

El libro también será presentado en la Feria Internacional del Libro de Coyoacán el 16 de marzo a las 11 horas en el escenario Haruki Murakami.