El incremento de precios de los productos agropecuarios, principalmente frutas y verduras, se desaceleró en los días previos a las fiestas de fin de año. Sin embargo, los servicios, en particular los turísticos, y las mercancías no alimenticias experimentaron incrementos estacionales y repuntes tras concluir El Buen Fin, revelaron datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) reportó un incrementó de 0.42 por ciento en la primera quincena de diciembre, por arriba de la expectativa de mercado, de 0.39 por ciento. En términos anuales, la inflación general acumuló tres quincenas consecutivas de desaceleración, al ubicarse en 4.44 por ciento.

El Inegi publicó que los bienes que más incidencia tuvieron en la baja en la inflación fueron algunos productos agrícolas como papaya, con una caída de 18.56 por ciento quincenal; cebolla, tomate verde, papa y otros tubérculos; chile serrano, que descendieron 5.07, 8.59, 3.21, 8.76 por ciento, respectivamente. Mientras, huevo, plátanos, zanahorias, nopales y otros chiles retrocedieron 0.72, 3.48, 5.81, 4.83 y 5.3 por ciento, en ese orden.

Los precios que obstaculizaron el descenso del INPC fueron el de transporte aéreo, con un incremento de 38.47 por ciento, y el del jitomate, 6.65 por ciento.

El índice de precios subyacente, que excluye la energía y los alimentos frescos y determina la trayectoria de los precios en el mediano y largo plazos, reportó una ligera presión alcista, luego de seis quincenas de desaceleración, para ubicarse en 3.62 por ciento.

El no subyacente, que incluye productos agropecuarios y energéticos, registró un aumento de 7 por ciento anual en la primera quincena de diciembre, acumulando tres lecturas de desaceleración, mientras los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno presionan ligeramente los precios.

La inflación interanual se moderó de nuevo conforme se fueron disipando las últimas presiones en bienes agropecuarios. El subyacente se aceleró luego de una campaña de descuentos y promociones aparentemente más extensa de lo usual, lo cual posiblemente haya sido reflejo de una campaña de El Buen Fin más larga o intensa que en otros años, explicó Alejandro Saldaña, economista jefe de BX+.

Dicho repunte se concentró en el rubro de mercancías. Los servicios siguen encareciéndose muy por encima de su promedio histórico, pese a un contexto de bajo crecimiento. Sin embargo, se moderaron ligeramente, y por cuarta lectura consecutiva su alzase mantuvo debajo de 5 por ciento.