Moscú. El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, llamó ayer a Rusia y Ucrania a no escalar la guerra, tras el ataque al general Igor Kirilov, al tiempo que el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, se negó a comentar el hecho, pero aseveró a la cadena de noticias CNN que sin duda el ejército ruso había utilizado armas químicas y otros agentes para matar, mutilar y dañar al pueblo y a los soldados ucranios.

El portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, también los exhortó a abstenerse de actos que puedan agravar aún más las tensiones.

Un funcionario estadunidense, citado por la agencia noticiosa Afp, señaló que Washington no fue informado por adelantado y no estaba al tanto de la operación contra el jefe de la división de armas químicas del ejército ruso, después de que Kiev reivindicó el asesinato.

No apoyamos ni permitimos este tipo de actividades, añadió el funcionario sobre la muerte de Kirilov, de 54 años, quien fue sancionado en octubre por Reino Unido debido al supuesto despliegue de armas químicas en Ucrania.

Las cancillerías occidentales apenas reaccionaron al ataque que ocurrió en Moscú. Un portavoz del gobierno británico declaró que no lamentarían el deceso de “un individuo que participó en una invasión ilegal e impuso sufrimiento y muerte al pueblo ucranio.

El ex presidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, Dimitri Medvediev, advirtió sobre un castigo inevitable contra Kiev por la muerte del general y uno de sus asistentes.

Los intentos de intimidar a nuestro pueblo, detener el avance del ejército ruso y azuzar el miedo están destinados al fracaso, agregó Medvediev.

El jefe adjunto de la misión permanente de Rusia ante la ONU, Dimitri Polianski, aseveró que en la próxima reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas plantearán discutir sobre el ataque.

Definitivamente, plantearemos la cuestión en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU que solicitamos para el 20 de diciembre sobre el suministro de armas occidentales a Ucrania y su impacto en las perspectivas de una solución pacífica a la crisis ucrania, señaló Polianskim.

Los responsables de este crimen deben recibir el castigo que merecen y afrontar la condena inequívoca de toda la comunidad internacional, enfatizó el funcionario en su canal oficial de Telegram.