Es su poemario más reciente, en el que refrenda su compromiso como hablante y autor en náhuatl
más personalhasta ahora, la más íntima e introspectiva.Foto Germán Canseco
Sábado 9 de noviembre de 2024, p. 4
Situado a los 50 años, en lo que él denomina el ecuador de su vida, el poeta nahua Mardonio Carballo asume su más reciente libro, Chén che re, no sólo como el primero de su autoría que le satisface por completo desde la letra inicial hasta el punto final.
También lo considera una especie de cartografía vivencial que lo ubica en el punto exacto en el que se encuentra actualmente. Es, afirma tajante, su obra más personal
hasta ahora, la más íntima, la más introspectiva, la que más lo revela y expone.
Todo lo que soy está volcado en este libro. En él se refleja el ser humano que es Mardonio y sus locuras
, afirma el también gestor cultural, comunicador y activista originario de Chicontepec, Veracruz, quien con este poemario, como ha hecho con todo su quehacer a lo largo de tres décadas de trayectoria, refrenda su compromiso como hablante y escritor en lengua indígena.
Siempre hemos puesto al idioma náhuatl como una suerte de escudo y lanza. Quienes hablamos una lengua originaria esgrimimos nuestras lenguas; tiene que ver con el orden político, es una forma de politizarlas, al tratarse de lenguas juzgadas, avasalladas, que tienen el derecho de vivir y de pervivir
, subraya.
Algo que se ha pasado por alto, sin embargo, es que los poetas en lenguas indígenas somos ante todo poetas, sólo que tenemos un encargo muy superior a eso, que es el de reivindicar tanto el uso de nuestras lenguas como a los pueblos que las hablan. Es por eso, entonces, que escribimos en lenguas indígenas.
Coeditado por Nauyaka Producciones y Ediciones y la Secretaría de Cultura de Veracruz, Chén che re es el segundo libro de Mardonio Carballo que aparece este 2024, luego de una sequía de 10 años sin publicar. Fue precedido por La canción de las flores, lanzado en enero con el sello francés JBE Books, especializado en libros de arte, en un ambicioso proyecto editorial que consistió en tres ediciones bilingües: náhuatl-español, náhuatl-inglés y náhuatl-francés.
Al igual que ese poemario, el más reciente también aparece en una edición en la que el náhuatl cohabita con otros idiomas: español e inglés, éste gracias a la participación del traductor anglosajón Adan W. Coon, quien es también hablante de náhuatl en la variante dialectal de la huasteca.
De igual forma, esta nueva obra está enriquecida por hermosas ilustraciones, ahora de Mauricio Gómez Morín, que terminan por elevar la expresión poética del autor nahua a un lenguaje más, el visual.
Mauricio hace una lectura a veces literal del poema y otras hasta sicoanalítica, lo cual me da miedo, porque provoca que el poema se desnude aún más. Sí ya de por sí son obras que exponen lo que soy, las ilustraciones hacen que se me vean las tripas
, indica Mardonio Carballo, quien refiere que el título de este poemario fue retomado del vocablo onomatopéyico que se utiliza en la huasteca para nombrar al pájaro carpintero.
Para el autor, llevar esta obra también al inglés implica tomar una postura política. Es, asegura, confrontar y rebatir lo que “se piensa de que las lenguas (originarias) son arcaicas y nada contemporáneas; en fin, toda esa sarta de tonterías que han endilgado de manera terrible a nuestras lenguas.
Entonces, al traducir al inglés este libro, es dotarlo de cierto dejo de contemporaneidad y quizás hasta de mamonería para decir que nuestros libros están en otros idiomas. Nunca he pensado, por ejemplo, que mi poesía va a pegar en Estados Unidos. Más bien es decir que aquí está nuestra lengua y que se puede traducir al inglés, el idioma dominante. Es una provocación.
Momento de preguntas y respuestas
Resultado de un proceso de 10 años que concluyó en 2021 con la pandemia, la aparición de Chén che re tiene lugar en un momento en el que Mardonio Carballo asume como muy importante en su vida, en el que, dice, se está preguntando y también respondiendo muchas cosas.
Estoy volviendo a tópicos que quizá tienen que ver con mi grado escatológico de mirar la vida: la muerte, el sexo, el deseo; pero, al mismo tiempo, con las cosas más primigenias del ser humano, como la observación de las flores, los árboles, los insectos y las aves
, señala.
“Entonces, pienso que este libro se parece mucho a mí, porque habla de todos esos tópicos que me gustan, a los que sumo el amor en sus diferentes formas. Hay, también, una suerte de desenfado al momento de escribir, al no estar ceñido a la construcción de una forma poética específica. Hago algunos guiños al tanka y al haikú japoneses, pero se quedan sólo en eso, en guiños, porque son formas muy rigurosas y yo, a veces, sacrifico mucho el rigor por el ritmo; soy un escritor que siempre piensa en la música.
Me parece que los poemas deben tener ritmo e imágenes, así como música, para que puedan conversar con quien los lee. Es falso lo que dicen algunos escritores de que no les importa que no los lean; si fuera así, no escribirían o no publicarían. A mí sí me importa que me lean; me es muy importante comunicar, me gusta hacerlo, por algo colaboro en medios como la radio y la televisión, e intento que mi trabajo en ellos tenga cierto aliento poético.
Chén che re será presentado hoy a las 12 horas en la Casa Universitaria del Libro de la Universidad Nacional Autónoma de México (Orizaba 24, colonia Roma) con la participación de la poeta tsotsil Enrique Lunez, el actor Carlos Camarillo, la periodista Marcela Turati, el versador y músico huasteco Rodolfo González Martínez, así como Silvia Alejandre, secretaria de Cultura de Veracruz, Mauricio Gómez Morín y el autor.