Alertan sobre brazaletes y acreditaciones falsas
Domingo 27 de octubre de 2024, p. a10
En los alrededores de la estación Puebla del Metro, un grupo de revendedores con cangureras cruzadas sobre el pecho, gorras, camisetas y gafetes no oficiales de Fórmula 1 pregunta en voz baja a las personas que caminan hacia el autódromo Hermanos Rodríguez si buscan un boleto para poder entrar. Los policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana vigilan la zona, pero es tanto el movimiento en las puertas de ingreso a la carrera de calificación que su presencia pasa desapercibida.
¿En qué zona buscas?
, dice un señor camuflado con la indumentaria de Red Bull, celular en mano y mirando de reojo a quienes bajan por las escaleras del transporte colectivo. Los precios varían según el sector de las gradas. Tengo desde mil 750 en la sección naranja hasta 25 mil 500 en la verde, ¿cuántos necesitas?
, insiste. El problema de la reventa no tiene una solución fácil. Como ahora existen otros canales de negocio –grupos de Facebook y perfiles de Instagram– decenas de aficionados contactan a los comerciantes de boletos mediante mensajes privados y con tiempo de anticipación.
El viernes me pasaron un grupo de Facebook y conseguí uno para la carrera de mañana, pagué cerca de 19 mil 500 pesos en la zona 6-A
, afirma Paola García Ruiz, estudiante guanajuatense que asiste a su primera edición del Gran Premio de México. Cada vez que la Fórmula 1 anuncia el regreso de los monoplazas al país se produce un fenómeno similar. Adquirir una entrada para las sesiones de práctica o la competencia de este serial implica enfrentarse a precios desorbitados o cambiantes, reventas ilegales y, en muchos casos, estafas.
Lo más recomendable es pagar hasta que el boleto pasa los filtros de seguridad
, explica Ángel Rodríguez, fotógrafo publicitario y comprador de un par de entradas en los ensayos de ayer que se elevaron casi al doble de su precio original. Vi un anuncio en Instagram con diferentes localidades disponibles. Pagué 4 mil 500 por cada uno en la sección café de gradas, pero con el acuerdo de que primero pasaba por el filtro de revisión. No todos los vendedores están dispuestos a eso, porque son códigos piratas o ya usados por otros
.
Desde mediados de noviembre pasado, la venta de abonos para asistir al autódromo Hermanos Rodríguez se agotó en la plataforma Ticketmaster. Con ello, los perfiles en redes sociales dedicados a comercializar entradas de manera irregular empezaron a extender su negocio por medio de varias publicaciones. La plataforma de reventa StubHub ofrece desde el viernes localidades dentro del estadio GNP, donde se ubica un tramo de curvas, en 79 mil 936 pesos. El más accesible, en la grada 3-A, tiene un costo de 17 mil 366 sin contar cargos por servicio.
Los conocedores de la situación prefieren acudir al lugar de la carrera para regatear por varios minutos con los revendedores. ¿Cuánto es lo menos?
, plantea un señor con traje de piloto de Ferrari, acompañado por su esposa a las afueras de la estación Ciudad Deportiva, también de la línea 9 del Metro. A diferencia de lo que ocurre en conciertos, partidos de futbol, beisbol o de equipos de la NFL, los hombres y mujeres que se dedican a ofrecer una entrada para el campeonato mundial de automovilismo utilizan artículos de diferentes escuderías para no ser descubiertos por las autoridades.
Mañana (hoy) van a subir, es mejor que aproveche
, advierten como si esta actividad fuera parte de una subasta en la que los precios se multiplican. Cuando abren el cierre de sus cangureras, algunos muestran los boletos que están sujetos a una liga de hule, señalan la sección o pasillo que les corresponde y negocian el precio final de su travesía en las inmediaciones de la Magdalena Mixhuca.
El viacrucis para conseguir entradas no está sólo en las inmediaciones del Hermanos Rodríguez, la web es el otro frente de la batalla y donde el fanático también se debe cuidar del engaño.
A través de páginas de Internet se ofertan acreditaciones y brazaletes apócrifos para el Gran Premio de la Ciudad de México, los cuales tienen un costo de 10 mil pesos, los más baratos, reportó el personal de OCESA durante la instalación de la mesa de revisión de novedades que encabezó el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, en el autódromo capitalino.
El representante de la promotora de espectáculos indicó que detectaron estas pulseras falsas, son de color azul y los chips que contienen no pueden ser leídos, por lo que se ha impedido el ingreso de las personas.
Varios detenidos
Por su parte, el jefe de la policía explicó que este tipo de acciones serían clasificadas como reventa y a las víctimas del fraude, además de impedirles la entrada, se les exhorta a presentar una denuncia.
Además, detalló que como resultado del operativo desplegado, 14 personas han sido detenidas por apartar lugares y permitir que vehículos se estacionen en zonas prohibidas, mientras otras dos fueron llevadas ante el juez cívico por reventa de boletos.