En comisiones del Senado avanzó anoche la reforma constitucional enviada por la presidenta Claudia Sheinbaum en materia de igualdad sustantiva, derecho de las mujeres a una vida libre de violencias y erradicación de la brecha salarial por razón de género, al ser aprobada por unanimidad.

Martha Lucía Micher, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, explicó que la iniciativa tiene como eje fundamental llevar a la Constitución los principios referidos.

Se trata de una reforma de gran calado que responde a las aspiraciones de la población femenina, subrayó al presentar el documento ante los integrantes de la comisión que preside y las de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos.

El senador petista Alejandro González Yáñez expuso que esta propuesta es un reconocimiento tácito de que la desigualdad de género persiste. Se está rompiendo el techo de cristal, pero existen otros retos, añadió.

Mely Romero, del PRI, resaltó que el dictamen es un logro construido a partir de los avances conseguidos a pesar de las resistencias, las cuales en muchos casos llegaron al absurdo.

La iniciativa plantea modificar los artículos 4, 41, 73, 116 y 123 de la Carta Magna y fue turnada a la mesa directiva del Senado para que le dé turno en el pleno senatorial y se someta a votación.

Propone que el Estado garantice el goce y ejercicio de los derechos a la igualdad sustantiva de las mujeres y a una vida libre de violencia. Para esto último tiene deberes reforzados de protección con las féminas, adolescentes y niñas.

De igual manera, se deberá prever que las instituciones de procuración de justicia cuenten con fiscalías de investigación de delitos por razones de género.

También se establece que los nombramientos de las personas titulares de la administración pública del Poder Ejecutivo federal y sus equivalentes en las entidades federativas y municipios tendrán que observar el principio de paridad.

Asimismo, propone que en la ley se establezcan los mecanismos tendientes a reducir y erradicar la brecha salarial de género.

A trabajo igual corresponderá salario igual, sin tener en cuenta el género, plantea la iniciativa.