Cultura
Ver día anteriorViernes 18 de octubre de 2024Ediciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Museo parisino festeja sus 90 años con una muestra sobre el trampantojo
Foto
▲ Obra de Charles Bouillon que forma parte de la exposición en el Marmottan-Monet.Foto tomada del sitio del recinto
Foto
▲ Una pintura de Cristoforo Munari que forma parte de la exposición en el Marmottan-Monet.Foto tomada del sitio del recinto
 
Periódico La Jornada
Viernes 18 de octubre de 2024, p. 3

París. El museo parisino Marmottan-Monet celebra 90 años con una exposición que reúne cerca de 90 cuadros y obras de arte en torno al trampantojo, desde el primer cuadro que se conoce de esta técnica, de 1520, hasta obras contemporáneas.

Muy apreciado por el gran público, el trampantojo es una ilusión pictórica, un ejercicio de virtuosismo en el que el pintor simula la realidad mediante juegos de perspectiva y sombras que hacen creer al espectador que los objetos salen del cuadro.

Un armario con botellas y libros de autor anónimo, pintado hacia 1520 en Alemania, es el primer ejemplo de trampantojo que se conoce en la historia del arte; se conserva en el museo Unterlinden de Colmar (Alsacia, Francia).

Estamos ante un trampantojo porque los objetos son a la escala de los elementos que adornan la alacena, explica la comisaria de la exposición, Sylvie Carlier.

Los orígenes del artificio se remontarían a la edad clásica griega, según los estudiosos. Plinio El Viejo cuenta que el pintor griego Zeuxis logró hacer unos racimos de uva tan verosímiles que los pájaros acudían a picotearlos.

El auge del trampantojo se produjo a partir del siglo XVII. La ilusión de profundidad se utilizó para pintar bóvedas, para dar sensación de profundidad a una sala. Pero también para divertir al aficionado al arte, con cuadros pequeños de los que parecen brotar papeles, pinceles, animales o seres humanos.

En la exposición del Marmottan-Monet destaca la jaula de un mono pintado por el austriaco Franz Rösel von Rosenhof en el siglo XVII. O un prodigioso trampantojo de un pajarillo muerto esculpido en mármol (hacia 1775) que surge del marco gracias a la maestría del escultor francés Jean Antoine Houdon.

A partir del siglo XIX la moda del trampantojo se trasladó a Estados Unidos, con pintores como John Frederick Peto o John Haberle, que pintaban billetes de banco que parecían al alcance del espectador.

El trampantojo fue recuperado luego por movimientos de vanguardia, como el surrealismo o pintores como Picasso, y no cesa, con artistas hiperrealistas como Ton de Laat.

La muestra permanecerá abierta hasta el 2 de marzo; se complementa con una exhibición de la pintora francesa Carole Benzaken, en diálogo con las obras impresionistas del recinto.