Alejandra Orozco se encuentra en un proceso de búsqueda. Un par de meses después de anunciar su retiro de la plataforma, la ex clavadista reorganiza sus labores diarias mientras reflexiona sobre el rumbo que tomará su vida.

“Tengo que descubrir quién soy, qué quiero aportar. Fueron dos décadas de desayunar, comer y cenar clavados y es difícil cambiar el chip. Esta nueva etapa también la quiero disfrutar y no me cierro a ninguna oportunidad”, comentó Ale Orozco, doble medallista olímpica.

¿Qué sigue ahora?, es la pregunta del millón para la tapatía, quien considera las opciones de retomar sus estudios en negocios internacionales o quizá ocupar algún cargo administrativo. Ser entrenadora, por ahora no.

Se cerró un ciclo de manera sana y llega esta Ale con ideas a futuro. Por ahora estoy descansando de todo el estrés mental y físico para dar parte al aprendizaje en otras áreas. De lo que sí estoy segura es de que quiero mantenerme activa, pero viendo el deporte desde otro ángulo.

La tapatía disfruta de su tiempo libre. Por primera vez en 20 años puede decir sí a los compromisos familiares, fiestas y hasta desvelos ocasionales. Y aunque algunos consideran que su adiós a la piscina fue prematuro por su edad (27 años), ella está segura de que tomó la decisión correcta.

Ya era tiempo. Ahora puedo salir a comer, tener espacio para mí, mi familia y mi pareja. Debo cambiar mi entorno después de culminar mi etapa como atleta de alto rendimiento de manera muy tranquila y rodeada de una gran red de apoyo.

A los 15 años, Alejandra escribió su nombre en la historia del deporte mexicano al ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Desde entonces, se trazó la meta de construir una carrera inolvidable.

Me tocó ser la más joven y también la mayor en la selección. He vivido todas las etapas como deportista y estoy muy satisfecha de lo que conseguí, a pesar de que no pude cerrar mi carrera con una medalla en los Juegos de París. Tuve una trayectoria muy resiliente.

En el palmarés de Alejandra Orozco destacan también el bronce olímpico obtenido en Tokio en sincronizados 10 metros plataforma con Gaby Agúndez, además de cinco participaciones en Juegos Panamericanos desde Toronto 2015 hasta Santiago 2023. Asimismo estuvo en dos ediciones de Olímpicos de la Juventud.

Ejecuciones impecables

Ahora que mira los clavados desde el retiro, Ale reflexiona sobre el panorama que enfrentarán sus compañeros en su camino rumbo a los Juegos de Los Ángeles 2028.

El nivel de los saltos cada vez es más demandante, exige perfección. Los clavados que antes te daban cierto número de puntos, ahora te dan la mitad, compartió.

Los jueces, analizó la jalisciense, son muy estrictos y se basan en la escuela china de clavados.

Es tan complicado obtener los 8 y 9 que muchos atletas, incluyéndome, tuvieron que bajar su nivel de dificultad para no arriesgar sus aspiraciones al podio. Cada detalle cuenta; se trata de buscar ejecuciones impecables. Ya no se paga la valentía, es todo o nada.

A pesar del exigente panorama que se avecina, la también medallista mundial está segura de que sus compañeros podrán con el reto.

La actual generación mexicana tiene mucho nivel y también experiencia. Seguimos siendo potencia y aunque algunos nos retiremos jamás se van a quedar desamparadas la plataforma o el trampolín. Si algo ha demostrado esta selección es que pese a las adversidades nunca tiraron la toalla. Aquí nadie se rinde. El deporte, añadió, debe evolucionar.

Así tiene que ser. Las competencias deben ponerse cada vez más difíciles para que puedan surgir nuevas figuras, romperse récords y darle más espectáculo al público. El esfuerzo para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles será al doble, pero nuestros clavadistas tienen la calidad para pelear al tú por tú con cualquiera.