Biden elogia a Ucrania, pero omite comentar sobre Gaza
Manifestantes bloquearon vía frente al organismo mundial en protesta por el arribo del premier israelí
Viernes 27 de septiembre de 2024, p. 23
Washington y Nueva York., La yuxtaposición esta semana de, por un lado, el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas realizando una sesión de emergencia para frenar la guerra de Israel contra Líbano, mientras a sólo 36 cuadras de ahí y a la misma hora, el gobierno del país que suministra las bombas que Israel lanza para matar civiles libaneses (y palestinos en Gaza) fue anfitrión de una gala en el famoso Museo Metropolitano de Arte ofreció una imagen cruel pero precisa de los fracasos de la ONU en su principal misión de poner fin a las guerras.
Con el número de muertos en Líbano de unos 700, y el total de asesinados en Gaza superando 40 mil, orador tras orador en el llamado debate de alto nivel de la Asamblea General condenó esta semana la campaña bélica de Israel en Gaza y Líbano. Algunos de los gobiernos se atrevieron a criticar al país que suministra el armamento a Israel –aunque casi nunca por nombre–. Este jueves, miles de manifestantes lograron bloquear brevemente la avenida frente a la entrada de la sede de la ONU en protesta por el arribo del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien tiene programado subir al podio de la Asamblea General el viernes en el desfile anual de mandatarios.
El presidente Joe Biden, en sus comentarios durante el coctel que ofreció en el Museo Metropolitano de Arte, reconoció que el Consejo de Seguridad de la ONU no está funcionando de manera efectiva (sin hacer autocrítica), mientras elogiaba al pueblo de Ucrania por levantarse ante la invasión de Rusia, pero evitó mencionar de manera directa al otro conflicto bélico en que está involucrado –la guerra de Israel en Gaza y ahora en Líbano–. Un par de días antes, en su discurso ante la Asamblea General, el mandatario estadunidense sí reconoció el infierno
que están sufriendo los palestinos en Gaza y también en el conflicto con Líbano, pero mientas ofreció una amplia condena de Hamas y Hezbollah por nombre, evitó toda crítica directa de Israel en estas guerras –silencio que retumba contra la mayoría de los 193 países miembros de la ONU–.
Durante casi un año, el gobierno de Biden ha insistido en que ha trabajado incansablemente
por un cese el fuego en Gaza, pero ha rehusado demandas de su propio pueblo para dejar de proveer armas a Israel. De hecho, el gobierno de Biden anunció esta semana que está otorgando otros 8.7 mil millones de dólares en equipo militar a Israel. El ministerio de Defensa de Israel declaró en un comunicado que esta nueva asistencia subraya la asociación estratégica firme y perdurable entre Israel y Estados Unidos y el compromiso absoluto a la seguridad de Israel
, reportó Reuters.
Pero la principal estrella internacional esta semana para Estados Unidos es el presidente ucranio, Volodymir Zelensky, quien acudió al coctel de gala en el Metropolitan el miércoles en la noche, y este jueves viajó desde Nueva York para reunirse con Biden y después, por separado, con la vicepresidenta y candidata presidencial demócrata, Kamala Harris, con su incansable misión de obtener más armas y autorización para usarlas contra objetivos dentro de Rusia. Estados Unidos ha otorgado en total más de 55 mil de millones en asistencia militar a Ucrania y esta semana anunció otro paquete de más de 8 mil millones. El ucranio también tiene una cita para reunirse con Donald Trump este viernes.
En el contexto de la reunión de la comunidad mundial, las guerras en Medio Oriente y Ucrania ofrecen más evidencia del fracaso, si no de irrelevancia, de la ONU en su misión fundacional de resolver conflictos y mantener la paz. El propio secretario general de la ONU, Antonio Guterres lo reconoció, afirmando ante los delegados del mundo que la paz demanda acción. Y la paz demanda liderazgo. En vez de eso, estamos viendo una profundización de divisiones geopolíticas y desconfianza
.
Ritual de décadas
Aunque no hay acción, sí hay resoluciones. repitiendo un ritual de décadas, la Asamblea General, por un voto de 124 contra 14 (y varias abstenciones), aprobó este mes una resolución no vinculante condenando, una vez más, la ocupación de Israel de territorios palestinos. Pero una acción sobre ese tema en el Consejo de Seguridad ha sido bloqueada constantemente por el veto de Estados Unidos sin importar si hay un gobierno demócrata o republicano. Un total de 144 países aprobaron una resolución condenando la invasión de Ucrania por Rusia, pero toda acción al respecto ha sido bloqueada por el veto de Rusia en el Consejo de Seguridad. La muestra más grande de consenso en la ONU se marca cada año cuando la abrumadora mayoría de los países miembros piden el fin del bloqueo estadunidense a Cuba, pero Washington anula esta exigencia con su veto.
Esta semana, los discursos de los representantes de los países del mundo continúa hasta el lunes (con un descanso el domingo). Que no exista ningún otro espacio en el mundo donde cada país tiene derecho a la palabra es algo significativo, sobre todo para los menos poderosos. Pero como el presidente palestino, Mahmoud Abbas, declaró este jueves al tomar su turno ante la Asamblea General, la guerra en su país ya no se trata de un conflicto entre Israel y los palestinos. Esta locura no puede continuar. El mundo entero es responsable de lo que está sucediendo a nuestro pueblo
, declaró.