Sao Paulo., Los incendios están arrasando en Sudamérica, desde la selva amazónica brasileña hasta los bosques secos de Bolivia, pasando por los mayores humedales del mundo, y han batido el récord de incendios registrados en un año hasta el 11 de septiembre.

Los datos de satélite analizados por de Instituto Nacional de Investigación Espacial (INPE) de Brasil registraron 346 mil 112 focos de incendio en lo que va de año en Sudamérica, superando el récord de 2007 cifrado en 345 mil 322 focos, en una serie de datos que se remonta a 1998.

El humo de los incendios brasileños ha oscurecido los cielos de ciudades como Sao Paulo, alimentando un corredor de humo que se extiende diagonalmente a través del continente, desde Colombia hasta Uruguay.

Brasil y Bolivia han enviado miles de bomberos para tratar de controlar las llamas, pero en su mayoría siguen a merced de las condiciones meteorológicas extremas que alimentan los incendios.

Los científicos afirman que, aunque casi todos los incendios son generados por el hombre, las recientes condiciones de calor y sequía provocadas por el cambio climático contribuyen a que el fuego se propague con mayor rapidez. Sudamérica se ha visto afectada por una serie de olas de calor desde el año pasado.

Nunca tuvimos invierno, expuso Karla Longo, investigadora de la calidad del aire del INPE, sobre el clima en Sao Paulo en los últimos meses. Es absurdo.

A pesar de ser todavía invierno en el hemisferio sur, las altas temperaturas en Sao Paulo se han mantenido por encima de los 32 grados centígrados desde el sábado.

En La Paz, cientos de personas se manifestaron para exigir medidas contra los incendios, portando pancartas y carteles como lemas como: Bolivia en llamas y Por un aire más limpio, dejen de quemar.

Por favor, dense cuenta de lo que está pasando en el país, hemos perdido millones de hectáreas, clamó Fernanda Negrón, una activista por los derechos de los animales, en la protesta con el eslogan Millones de animales han muerto quemados.

El mayor número de incendios este mes se registra en Brasil y Bolivia, seguidos de Perú, Argentina y Paraguay, según los datos del INPE.

Aquellos provocados por la deforestación en la Amazonia generan un humo intenso.