Monterrey, NL., Un nuevo caso de presunta corrupción se reveló en el ayuntamiento de Juárez, conurbado a esta ciudad, como parte de los informes de la transición en la administración municipal: además del alto número de aviadores –personas que cobran sin laborar–, que ascendería a mil falsos burócratas, y casos de nepotismo, ahora se descubrió que el gobierno local tiene como proveedoras a por lo menos 17 empresas que están en la lista negra del Sistema de Administración Tributaria (SAT), que las considera fantasmas, algunas de ellas con domicilios inexistentes.

Esta situación habría ocurrido no solamente durante el trienio de actual alcalde, el priísta Francisco Treviño, sino también en los anteriores dos periodos que encabezó su hermano Heriberto, actual coordinador de los diputados locales del tricolor.

De acuerdo con el equipo del edil electo Félix Arratia, del partido Movimiento Ciudadano, además de la red de aviadores y nepotismo en el ayuntamiento de Juárez, que implicaría un desvío de entre 12 y 23 millones de pesos mensuales en la gestión de Treviño, se detectó que él y su consanguíneo realizaron operaciones con proveedores irregulares.

Los colaboradores de Arratia sostuvieron que en 2015, cuando el priísta inició sus labores como presidente municipal, se entregaron por lo menos 62 millones de pesos a firmas que la autoridad tributaria acusa de emitir comprobantes fiscales apócrifos, entre ellas Comercializadora Burzum, Constructora Badazu y Comercializadora Inner Circle.