El desafío en ciudades como la de México y las del resto de América Latina es hacer frente a la desigualdad económica, la segregación social y temporal que se ha acumulado a lo largo de los pasados 50 años, afirmó el urbanista Carlos Moreno, profesor de la Universidad Panthéon Sorbonne, en Francia, quien afirmó que se requiere cambiar el paradigma y ofrecer un futuro que permita construir otra manera no sólo de alojarse, sino de vivir en las urbes con dignidad y bienestar social.

En entrevista con este diario durante una visita que realizó a la capital del país, el creador del concepto Ciudad en 15 minutos consideró que la Ciudad de México está en un momento histórico al haber una especie de alineación de planetas con los diferentes niveles de gobierno, que abre la posibilidad de que sea un ejemplo para el conjunto de América Latina de que sí es posible salir de una visión segmentada de la vivienda como propiedad y sin servicios, a un hábitat integral.

Explicó que el plan de ordenamiento territorial que ha desarrollado en ciudades como París, Francia, permite reconstruir lo que llama el arcoíris de la alta calidad de la vida social, en el que las necesidades cotidianas, como el alojamiento, el trabajo, el comercio, la educación y el entretenimiento están a corta distancia y se puede acceder a ellas a pie, en bicicleta o en transporte público.

Regenerar los barrios

A cada una le damos un color, y los mezclamos para que en todo tiempo y en todo lugar esos colores sean múltiples y accesibles. Es una hoja de ruta que va más allá de que le llamemos de 15 o 30 minutos, porque lo que interesa es tener una proximidad feliz y disminuir la huella de carbono, crear economía local y regenerar los barrios.

Dijo que este concepto ha recobrado fuerza a nivel mundial y se ha demostrado que se puede aplicar independientemente de la talla y la densidad de la ciudad, así como en contextos sociales, económicos y culturales diferentes; lo que se busca es salir de la segmentación y desarrollar una ciudad policéntrica.

Apuntó que cualquier ciudad que se analice ha sufrido durante los años recientes un proceso de elitización y segmentación social muy grande, que ha llevado a crear lugares corporativos muy modernos donde se trabaja, y por otro lado, se excluye a mucha gente que vive sin tener acceso a servicios básicos.

Se requiere voluntad política

El especialista franco-colombiano acotó que no es una varita mágica, pero tampoco es difícil de realizar si se tiene voluntad política para hacer una ciudad más viable y socialmente inclusiva.

Comentó que durante su visita a la Ciudad de México se reunió con la jefa de Gobierno electa, Clara Brugada, y su equipo de trabajo, a quienes planteó que la primera etapa para llevar a cabo esta estrategia es hacer un diagnóstico de cada una de las necesidades cotidianas por zonas y observar cómo se encuentran distribuidas, así como identificar quiénes son sus habitantes, para implementar una política urbana transformativa.

Destacó que lo más difícil de lograr es la confluencia de los distintos niveles de gobierno, pero ahora en la ciudad se vive un momento histórico, donde todos están alineados con la idea de hacer justicia para los habitantes y ofrecer oportunidades para todos.