Lerdo, Dgo., Dicen por ahí que vamos a ser autoritarios, que se acabó la democracia en México. Todo lo contrario ¿Qué pasó el 2 de junio? ¿Quién decidió quién va a gobernar? ¿Quién decidió los diputados y los senadores? ¡El pueblo de Coahuila, el pueblo de Durango y el pueblo de México!, lanzó la presidenta electa, Claudia Sheinbaum.

Un día después de que el Instituto Nacional Electoral (INE) confirmara la mayoría calificada en San Lázaro a Morena y sus aliados, Sheinbaum reivindicó el origen democrático de su elección como primera presidenta y de la correlación de fuerzas en el Congreso. Y dijo justo en esta región de La Laguna, donde confluyen los últimos reductos gobernados por el PRI, antaño el partido hegemónico: Durango y Coahuila.

Durante la inauguración de la segunda etapa del proyecto Agua Saludable para La Laguna, la morenista no dejó de lado la cortesía política y deslizó que bajo su administración, en ambas entidades trabajarán de la mano y en coordinación con los gobernadores de extracción opositora, Esteban Villegas y Manolo Jiménez, de quienes había escuchado elogios para ella y el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Les ofreció colaboración, pero ante ellos también proclamó, una vez más, la continuidad del modelo económico y social del humanismo que instauró López Obrador sobre la premisa de primero los pobres. Un principio que no sólo ha permitido atender a los sectores más necesitados, sino que ha beneficiado a los empresarios, esto es, ha demostrado que da resultados, subrayó.

“Continuidad en el proyecto que ha permitido una transformación tersa e histórica, porque en el pasado, quien llegaba al gobierno buscaba la manera de deslindarse de su antecesor. A veces hasta decían: ‘no, yo no tengo nada que ver con el anterior’, y se perdía la continuidad.”

En su momento, el Presidente aludió a la relevancia de contar con mayoría calificada en el Congreso, porque permitirá incorporar a la Constitución los programas sociales, que así dejarán de ser acciones gubernamentales, pues con independencia de quién esté en el gobierno, serán derechos sociales de la población.

La presencia de López Obrador y Sheinbaum en esta región fue para inaugurar la segunda etapa del ambicioso proyecto Agua Saludable para La Laguna, con lo cual las ciudades duranguenses de Lerdo y Gómez Palacio, así como Torreón, Coauhuila, dejarán de abastecerse de pozos contaminados con arsénico.

El director de Conagua, Germán Martínez, informó que con la inversión en infraestructura hidráulica para traer agua desde el río Nazas permitirá surtir 200 millones de metros cúbicos anuales a La Laguna, beneficiando a 1.6 millones de personas en lo inmediato, y a futuro, 2 millones durante 50 años. Además, señaló, permitirá recuperar el acuífero principal de La laguna, que desciende dos y tres metros por año.

Sheinbaum ofreció profundizar en el programa Agua Saludable para esta región, no sólo para tecnificar las tierras de riego, sino para garantizar que el recursos que se abastecerá desde el Nazas efectivamente llegue a las casas de toda la población de esta zona.

Aunque entre el Ejecutivo federal, su próxima sucesora y los gobernadores el trato fue cordial, al fin de gira en tierras bajo gobiernos priístas, entre los asistentes no hubo la efervescencia que caracteriza los actos oficiales de López Obrador en entidades con gobierno morenistas.

Entre los políticos, la cordialidad imperó. Cómo me hubiera gustado conocerlo antes; cómo me hubiera gustado trabajar más con usted, Presidente, dijo el priísta Villegas al Ejecutivo federal, quien con la multimillonaria inversión que autorizó para La Laguna resolverá el problema de agua en la región durante los próximos 50 años.

En respuesta, López Obrador elogió la postura asumida por sus adversarios, porque aun cuando ha habido posiciones encontradas, no han pasado de los insultos y mentadas, pero Manuelita hace tiempo que está en el Cielo. Y cuando se gobierna se tienen que aguantar cuotas de humillación.