Morelia, Mich., El respaldo del líder del Sindicato Nacional Minero, Napoleón Gómez Urrutia, a los integrantes de la sección 271, con sede en Lázaro Cárdenas, en el conflicto que mantienen con la acerera ArcelorMittal, permitió recuperar la confianza y la decisión de luchar por un reparto de utilidades justo, derecho que pretende ser arrebatado por la empresa, manifestó el trabajador Genaro Guzmán.

En entrevista con La Jornada, dijo que hay acercamiento entre el Comité Ejecutivo Nacional (CEN)del sindicato y los huelguistas. Tenemos ánimo y hay mucha participación de 3 mil mineros.

El obrero de base explicó que se han negado a hablar con reporteros porque se malinterpretan las declaraciones y la compañía de capital indio, ha utilizado todos los medios para desacreditar la huelga, que ya cumplió 52 días. La situación ha sido complicada, apuntó.

Por su parte, el ex minero Francisco Zamudio expuso que la siderúrgica sostiene que está a favor de la legalidad, pero los dos años anteriores cuando también se redujo el reparto de utilidades, la empresa nunca mostró la carátula.

Detalló que ésta es un informe sobre producción anual que entrega la empresa al Servicio de Administración Tributaria y a los trabajadores, pero nunca se lo dieron a conocer a éstos últimos, porque establece que 10 por ciento de las ganancias deben ser para los asalariados.

Refirió que en 2023 los empleados recibieron más de 200 mil pesos de utilidades (correspondientes a 2022), y mediados de mayo de este año comenzó a circular la información de que serían 60 mil pesos a los obreros de planta y 10 mil para los empleados de la mina de hierro ubicada en la tenencia de La Mira, municipio de Lázaro Cárdenas, a 10 kilómetros de la planta acerera.

Los trabajadores no aceptamos la oferta de la empresa porque la producción de los derivados del acero fue mayor, y se vende en dólares, no en pesos, pero ya se les hizo costumbre querer rebajar al máximo las utilidades, reprochó Miguel Ángel Montes, uno de los huelguistas.

En cuanto a la ilegalidad de la huelga que promovió ArcelorMittal y que respaldaron algunos jueces federales, no es cierto, porque el 24 de mayo se llevó a cabo un paro de 24 horas, y el 25 comenzó la huelga de hechos que contempla la Constitución; luego se dio parte a la instancia correspondiente y el 4 de junio se colgaron las banderas rojinegras, comentó un miembro de la dirigencia estatal de la sección 271.

Hay mil despedidos

Agregó que de acuerdo con mensajes que les ha hecho llegar ArcelorMittal, por negarse a aceptar su oferta de concluir la suspensión de actividades, “fueron despedidos mil trabajadores pero a ninguno se le ha entregado la rescisión de contrato. Tenemos ánimo y hay mucha participación de 3 mil mineros, incluso hay 55 piquetes –pequeños plantones– cada 100 metros alrededor de las instalaciones de ArcelorMittal para evitar que alguien pretenda entrar y nueve piquetes alrededor de la mina”, ubicada en la tenencia de La Mira, destacó.

En la marcha de los mineros el 11 de julio en la ciudad portuaria, por el 90 aniversario del Sindicato Nacional Minero, se volcó la gente, porque se veía venir una división de la fracción sindical y no fue así, porque nuestro líder nacional Gómez Urrutia dio la cara y respaldo totalmente la huelga, subrayó Miguel Ángel Montes.

Entonces los empleados desconocieron a los integrantes del comité de la sección 271 y se nombró a los suplentes, porque estaban apostando contra la huelga. Ahora ya hay acercamiento del comité estatal de la sección 271 y el CEN, por lo que hay ambiente de unidad, coincidieron los entrevistados.

En este contexto, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, consideró que en las negociaciones entre ArcelorMittal y el Sindicato Minero es prioritario preservar el empleo y que se respeten los derechos laborales de los empleados, entre ellos el reparto de utilidades transparente y completo.

En conferencia, el mandatario morenista señaló que si la sección 271 solicita su intervención directa, como ocurrió en 2022, participará de manera más decidida para entablar diálogo con el corporativo y concluir el conflicto laboral.