Jueves 27 de junio de 2024, p. 26
Canberra. Julian Assange, fundador de Wikileaks, retomó ayer en Australia su vida en libertad, tras declararse culpable de revelar secretos de defensa en el marco de un acuerdo con la justicia de Estados Unidos, que permitió poner fin a casi 14 años de batalla legal.
Assange aterrizó de noche en Canberra, la capital de su país natal, en un jet privado, tras pasar los últimos cinco años en la cárcel de alta seguridad londinense de Belmarsh, en Reino Unido.
Al salir del avión, vistiendo traje negro y una corbata ocre, levantó el puño y cruzó la pista para abrazar a su esposa Stella y a su padre, ante la mirada de decenas de periodistas.
Les pido por favor que nos den espacio, que nos den privacidad, para encontrar nuestro lugar, que dejen que nuestra familia sea una familia antes de que él pueda hablar de nuevo en el momento que elija
, dijo la esposa de Assange, quien dejó la sala sin hacer declaraciones.
El periodista, acusado de espionaje, fue declarado hombre libre
por la justicia de Estados Unidos antier por la jueza Ramona V. Manglona al final de una audiencia rápida en el tribunal federal de Saipán, en las Islas Marianas del Norte.
Assange no podrá viajar a Estados Unidos sin autorización, indicó el Departamento de Justicia en un comunicado.
En virtud del acuerdo, el ciberactivista de 52 años, acusado de haber publicado cientos de miles de documentos confidenciales estadunidenses en la década de 2010, se declaró culpable de obtener y divulgar datos sobre defensa nacional.
Alenté a mi fuente a proporcionar material clasificado
, declaró Assange en el juicio, refiriéndose a la soldado estadunidense Chelsea Manning, que filtró la información.
En tanto, el gobierno de Estados Unidos aún asegura que Assange puso a personas en peligro
al divulgar documentos confidenciales en la década de 2010.
Las revelaciones de Assange pusieron a personas en peligro
, declaró en Washington el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller. Y agregó que la información identificaba a personas en contacto con el Departamento de Estado, que incluían líderes de la oposición
y activistas de derechos humanos de todo el mundo
.
Por su parte, la oficina del presidente Joe Biden declaró que no tuvo ninguna relación con la finalización del caso judicial Assange. La Casa Blanca no participó de ninguna manera en el caso de Julian Assange (...) y las decisiones de conformidad (...) con su sentencia y su repatriación a Australia, eso fue un asunto del Departamento de Justicia
, señaló el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, en rueda de prensa.
En México, integrantes del colectivo 24F Vida y Libertad
, celebraron la liberación del fundador de Wikileaks y agradecieron al presidente Andrés Manuel López Obrador las acciones que emprendió a favor del periodista.
Con información de Arturo Sánchez Jiménez