Martes 18 de junio de 2024, p. a31
Boston. Fue el mismo día, 17 de junio, pero de 2008, cuando los Celtics de Boston ganaron por última vez el título de la NBA. Luego vino la sequía que se prolongó de forma dolorosa.
Ayer, por fin terminaron con esa racha de 16 años al vencer con un rotundo 106-88 a los Mavericks de Dallas en el TD Garden de Boston ante casi 20 mil asistentes para finiquitar las finales de la NBA por un global de 4-1.
La franquicia verde suma 18 anillos y rompe el empate que mantenía con los Lakers de Los Ángeles para volver a ser la más ganadora de la historia del baloncesto profesional.
Oh, Dios mío, lo hicimos. Es una sensación surrealista. ¡Lo hicimos!
, clamó en la pista un emocionado Jayson Tatum, líder de los Celtics y figura de esta noche memorable con 31 puntos y 11 asistencias.
Del lado de los Mavericks, la gran sorpresa de estos playoffs fue Luka Doncic, quien cerró las primeras finales de su extraordinaria carrera con 28 puntos y 12 rebotes.
La paliza que recibieron el viernes en Dallas, donde fueron aplastados por 38 puntos de ventaja, no afectó la moral de los Celtics, decididos a aprovechar su segunda oportunidad frente a sus casi 20 mil simpatizantes.
La corona 18 de Boston, en 23 finales disputadas, restaura el orgullo de una franquicia que, después dominar la NBA durante décadas, apenas había colgado una bandera de campeón en 16 años.
En ese periodo, los Lakers les habían dado alcance en la cima con ocho triunfos, el último de ellos en 2020.
La presión del público local jugó un papel importante. En la duela los Mavs se vieron superados desde el inicio por la mejor quinteta de la temporada y se despidieron del sueño de ser el primer equipo en la historia de la NBA en remontar una desventaja de 3-0 en la serie.
Luka Doncic no pudo dominar el juego como en su exhibición del viernes y Kyrie Irving se quedó en 15 puntos en otra frustrante noche en territorio rival, donde fue recibido como el enemigo número uno tras su controvertida partida de los Celtics en 2019.
Sellada la victoria de su ex equipo, Irving saludó a sus rivales en la pista cuando los Mavericks retiraron a sus titulares a falta de dos minutos para el final del partido.
Apagan el brillo de Mavs
El apagón de los superastros de Dallas dejó el partido en manos de la orquesta de los Celtics, equipo que ha dominado con algunos de los jugadores más talentosos de la liga como Jayson Tatum y Jaylen Brown (21 puntos), además de los mejores secundarios del torneo, como los bases Jrue Holiday (15), Derrick White (14) y el dominicano Al Horford (9), que inauguró su palmarés a sus 38 años.
Kristaps Porzingis (5), tras dos partidos de baja por lesión, también volvió a ponerse a las órdenes de Joe Mazzulla, quien, a sus 35 años, se consagró como uno de los entrenadores más jóvenes en ganar el campeonato.
Después de siete temporadas juntos, la dupla Tatum y Brown alcanzó su ansiado primer anillo como líderes de los verdes, borrando el sinsabor de la derrota de dos años atrás en las finales ante los Warriors.
El TD Garden de Boston se vistió de gala y culminó una noche espectacular con el título que tardó en llegar 16 años, mientras en el camino establecieron varias marcas.