Reporte de enero a marzo de 2024
Desde 1990 no se registraba esa diferencia entre ingresos y gastos gubernamentales // Aportaciones petroleras cayeron 31.9 por ciento
Viernes 31 de mayo de 2024, p. 18
El déficit público en México alcanzó 377 mil 540.8 millones de pesos en los primeros cuatro meses de 2024, monto que refleja la mayor diferencia entre ingresos y gastos públicos al menos desde 1990, primer año de la serie reportada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. También como porcentaje del producto interno bruto (PIB) esa brecha fiscal registró su mayor nivel en tres décadas.
La dependencia ya ha advertido que este año el déficit público podría escalar a 5.9 por ciento del PIB –dado que se requieren recursos para concluir los proyectos de infraestructura que prometió esta administración– y deja a la próxima administración un ajuste fiscal prácticamente de la mitad. Los estimados vertidos por Hacienda en los Pre Criterios 2025 apuntan a que ese año la brecha entre gastos e ingresos se reduzca a 3 por ciento como porcentaje del PIB.
De acuerdo con las series de Hacienda, el gasto neto pagado hasta abril superó en 14.4 por ciento a los ingresos presupuestarios, el mayor nivel desde que hay registro, y esa brecha alcanzó 1.2 por ciento del valor corriente del PIB al primer trimestre de 2024, reportado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
La brecha de 377 mil 540.8 millones de pesos se debe a que, en el preámbulo del proceso electoral, entre enero y abril el gasto público escaló 18.1 por ciento anual, su mayor nivel para un periodo similar (precomicios: 1994, 2020, 2006, 2012 y 2018). De acuerdo con los datos de la dependencia, en esos meses se erogaron 2 billones 998 mil 710.5 millones de pesos, en parte por el adelanto de transferencias a beneficiarios de programas sociales y por los recursos que se requieren para que se realicen las elecciones.
Del otro lado del balance público, los ingresos incrementaron 5.8 por ciento real, para alcanzar un total de 2 billones 621 mil 169.6 millones de pesos. En ellos, los aportes petroleros repuntaron 3.8 por ciento, sumaron 346 mil 275.8 millones de pesos; los no petroleros lo hicieron 6.1 por ciento, para alcanzar 2 billones 274 mil 893.8 millones.
Dentro de los ingresos petroleros se muestra que los captados por Petróleos Mexicanos aumentaron 16.9 por ciento; en tanto, los apoyos que el sector central ha dado a la petrolera a fin de que sea saneada –en particular la reducción de la carga por derecho de utilidad compartida– han hecho caer los ingresos petroleros del gobierno federal, hasta abril, en 31.9 por ciento.
Aumentó la recaudación
Como parte de los ingresos no petroleros, la recaudación realizada por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) aumentó 5.6 por ciento. El billón 768 mil 311.6 millones de pesos captado por el organismo se compone sobre todo del impuesto sobre la renta (ISR), que decreció 1.5 por ciento en términos reales; del impuesto al valor agregado, que lo hizo en 4.8 por ciento, y del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS), que aumentó 65.9 por ciento.
En cuanto al gasto, Hacienda detalló que el programable incrementó 24.2 por ciento. En él se incluye un incremento de 104.1 por ciento en los recursos erogados por el Instituto Nacional Electoral y de 67.3 por ciento en los ramos administrativos, los que dependen del Ejecutivo.
El informe de finanzas públicas y deuda pública muestra que en periodos similares –de enero a abril– de todos los años electorales, el incremento de 18.1 por ciento en el gasto público total es el mayor en tres décadas. En 1994 el avance anual fue de 11.2 por ciento; en 2000, de 14.2; en 2006, de 11.4; en 2012, de 11.9, y en 2018, de 9.8 por ciento.
En cuanto a la deuda pública total, ésta aumentó 6 por ciento, para alcanzar 15 mil 420.4 millones de pesos hasta abril de 2024. Se compone en 76.1 por ciento de requerimientos internos y el resto externos.