Mexicolectivo: futurismo con estilo // Colombia: pagar por no matar
// ¿Qué trae Televisa?, pregunta Adán Augusto
Espectaculares: reversa y carambola // Que aspirantes se deslinden
// Culpar a los quedabién // Los Ardillos y la negociación
El nuevo orden monetario mundial, según Zoltan Pozsar: desdolarización y papel del oro
Banca: México, cuento de hadas // Más de $831 mil millones // CCE tras mano de obra barata
Plasmar la llaga
Una noche de no saber nada
rancisco Cervantes Díaz, dirigente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), aseguró que legalizar a los migrantes que se encuentran en México permitirá al país contar con más mano de obra y ayudará a mitigar la informalidad laboral que existe. Asimismo, sugirió una alianza entre la iniciativa privada y la academia para capacitar a los migrantes con la finalidad de convertirlos en talento y aprovechar la mano de obra que hace falta a escala regional, tanto aquí como en Estados Unidos. El representante del organismo cupular destacó algunas de las fortalezas de la economía mexicana para dar sustento a las personas en movilidad al tiempo que se impulsa un crecimiento equitativo: está entre los primeros lugares en manufacturas y turismo a nivel global, cuenta con energía barata, se encuentra en una posición favorable ante las tensiones comerciales de Estados Unidos con China, y cuenta con un atractivo impresionante para las inversiones por relocalización de las cadenas de suministro ( nearshoring).
Adolfo Gilly, in memoriam
ecumberri te dio ocasión para escribir La revolución interrumpida, tema que te intrigaba en tu juventud, como admitías en París después de una conferencia tuya. Con esa obra trascendental nos ayudaste a reapropiarnos de nuestra memoria histórica, que habían secuestrado los priístas para legitimar su dominación usurpadora y autoritaria. Nos acogiste como camaradas en la revista Coyoacán, publicando nuestro texto sobre Las luchas campesinas en la sierra de Guerrero
, las de aquellos subalternos que tiraban del freno de mano para detener el ferrocarril del capitalismo salvaje. En tu Historia a contrapelo y en tus interpretaciones de las luchas de nuestros subalternos asumiste el reto de W. Benjamin. Adoptaste en tus interpretaciones las finas aportaciones gramscianas, benjaminianas, de Polanyi y J-M Vincent. Cuando te mostré las Acotaciones hermenéuticas, de Gadamer, y el texto de Nausicaä, bromeabas diciendo que era como magia, pues buscabas herramientas hermenéuticas para tus interpretaciones históricas. Con apertura asumiste diálogos académicos con Enzo Traverso sobre Melancolía de izquierda. Esparciste simiente para los jóvenes historiadores, quienes te reconocen como maestro y dan continuidad a la tarea que emprendiste. Nuestras diferencias sobre la política empírica no cancelaron nuestros diálogos. Agradezco tu solidaridad y tu exigencia ante el perverso sistema de injusticia por aquella injusticia que me infirieron. Hasta siempre, camarada Adolfo Gilly.
50 años del golpe de Estado cívico militar, que derrocó al gobierno legítimo y constitucional del presidente Salvador Allende, el actual mandatario chileno, Gabriel Boric, llama a reflexionar sobre las causas del fracaso político de la Unidad Popular. Sin embargo, dicha afirmación encubre una mentira mantenida a lo largo de medio siglo. Si la Unidad Popular, el gobierno y su presidente Salvador Allende, fracasaron, ¿qué necesidad tenían la derecha y la democracia cristiana de promover un golpe de Estado cívico-militar? Si la vía pacífica al socialismo era una quimera, ¿por qué Estados Unidos y la burguesía chilena se tomaron tantas molestias para derrocar el gobierno de la Unidad Popular? Y si la guerra civil y el enfrentamiento armado, por decisión expresa de Allende y la Unidad Popular, no era una opción, ¿para qué romper el orden constitucional? ¿No era mejor reditar la alianza anticomunista en las elecciones presidenciales de 1976, con Eduardo Frei Montalva y la Democracia Cristiana a la cabeza?
os conspicuos y poderosos miembros del oráculo superior del conservadurismo empresarial dictaron su nombre: Xóchitl Gálvez es la adecuada. Y empezó la fuga hacia delante a todo vapor. De inmediato, los grupos políticos dependientes giraron sus preferencias. Se han ido alejando de sus anteriores escogidos, seleccionados en sus conciliábulos y los propios intereses grupales. Los intelectuales de su mismo perfil empezaron el redundante regodeo difusivo sobre las sorpresivas virtudes de la preferida de las cumbres. Los grupos de interés social y político, que se han formado a la sombra de ese caudal inagotable de negocios, méritos y reconocimientos, iniciaron intensa ronda en las redes sociales. La avalancha informativa cuajó su pretensión promotora. Ya se tiene el antídoto preciso para nulificar la narrativa presidencial, claman con alegres voces. Ella será, de aquí en adelante, el centro del espectro comunicacional esperado, la fuente segura de sus esperanzas.
as elecciones presidenciales de 1988 quedaron marcadas por una fraudulenta operación de Estado. El asunto ha resurgido por declaraciones de actores principales en aquel año, particularmente del entonces secretario de Gobernación, Manuel Bartlett Díaz.
esde hace unas semanas la aspirante por la coalición Va Por México, Xóchitl Gálvez, se ha visto en diferentes medios de comunicación narrando su origen indígena y el apoyo que tuvo en poblaciones indígenas mientras fue funcionaria pública.Valdría la pena recordar la entrevista que la periodista Blanche Petrich, de La Jornada, tuvo con la precandidata en 2001.