La Red Latinoamericana de Acogimiento Familiar (Relaf) reconoció el trabajo realizado por el Gobierno de la Ciudad de México al crear un sistema de protección especializado para menores víctimas de delitos o que requieren de asistencia social.

La directora de la organización, María Matilde Luna, subrayó que esto ha sido posible gracias a la labor coordinada del DIF y la Fiscalía General de Justicia capitalinas, en la que se privilegia el bienestar de los niños y garantizar su derecho a la familia.

Parece algo obvio, pero lamentablemente no había esa articulación, y ahora, en la actual administración, se está estableciendo, lo que ha permitido evitar que los menores sean enviados a albergues.

Este diario publicó ayer que en lo que va del gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo se ha garantizado el derecho a la familia de 3 mil 353 menores de edad que estaban a cargo de la autoridad al ser devueltos a su familia de origen o extendida (abuelos y tíos) o colocados en núcleos familiares temporales y con fines de adopción.

Al participar en el foro Por el derecho a vivir en familia, Matilde Luna destacó que la Relaf y el Unicef realizan un acompañamiento de esta labor con las autoridades locales desde 2019, cuando se encontró que en la anterior administración las prácticas que se estaban desarrollando no tenían un enfoque de derechos.

De allí que, expresó, se tuvo que empezar desde hacer un registro de los niños que estaban bajo el cuidado de la autoridad, con un trabajo de colaboración entre el DIF y la fiscalía que no se tenía.

De esta manera, agregó, se comenzaron a destinar recursos humanos idóneos, sicólogos y trabajadores sociales que laboran las 24 horas del día los siete días de la semana en la fiscalía, que recibe a los niños y adolescentes víctimas de delitos.

Insisto: parece algo obvio, pero no existía hasta antes de esta intervención, lo que ha permitido mejorar mucho el seguimiento de las carpetas de investigación; en tanto, el DIF local se hace cargo de la protección de los menores y los esquemas para garantizar su derecho a la familia.

Esto además ha permitido reducir en más de 50 por ciento el número de niños y adolescentes que se encontraban en albergues cuando inició el gobierno, ya sea reincorporándolos a su familia de origen o extendida; así como de programas de acogimiento temporal y adopción.

La directora del DIF de la Ciudad de México, Esthela Damián Peralta, resaltó que la meta del gobierno capitalino es que al total de 438 menores que se encuentran en albergues se les dé acceso a su derecho a vivir en familia.

El mejor modelo para que un niño crezca es su familia y en eso estamos trabajando. Estoy segura de que vamos a lograr mejores resultados en este trabajo conjunto y colectivo, manifestó.