Nueva York. La Organización de Naciones Unidas denunció ayer que América Latina y el Caribe es la segunda región del mundo en la que más periodistas fueron asesinados en 2021, después de Asia y el Pacífico. Además, 87 por ciento de los crímenes reportados desde 2006 sigue sin resolverse.

El año pasado fueron asesinados en todo el mundo 55 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, de acuerdo con un informe de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). De éstos, 23 murieron en la región Asia-Pacífico y 14 en América Latina y el Caribe.

A pesar de que la cifra total supone el menor número de muertes anuales en más de una década, la Unesco señaló que la impunidad es generalizada y que los periodistas siguen enfrentando gran cantidad de riesgos.

El organismo indicó que en México murieron asesinados nueve periodistas el año pasado. Es una reducción del máximo reciente de 13 que registró el país en 2016, 2017 y 2018.

Colombia, Brasil, Guatemala, Ecuador y Haití son el resto de países de la región que reportaron la muerte de un periodista en 2021.

El informe de la Unesco destacó que dos tercios de los asesinatos a nivel mundial se perpetraron en países que no sufren conflictos armados, lo que demuestra los continuos riesgos a los que se enfrentan los periodistas en su labor informativa diaria para sacar a la luz las irregularidades. La situación era distinta en 2013, cuando dos tercios de los asesinatos tuvieron lugar en países en conflicto, menciona el informe.

Ayer trascendió que dos periodistas fueron asesinados por una pandilla en Haití.

La Unesco destacó que de los mil 284 asesinatos cometidos desde 2006 en el mundo, 87 por ciento sigue sin llevar a los culpables ante la justicia.

Una vez más, en 2021, demasiados periodistas pagaron el precio máximo por sacar a la luz la verdad, manifestó en un comunicado la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, quien llamó a hacer más para garantizar su protección.

Más allá de los asesinatos, el órgano mundial también subrayó los altos índices de encarcelamiento, agresiones, acoso e intimidación a periodistas en el mundo.

En abril pasado, un informe alertó del acoso en línea que sufren informadoras.