Héctor Ruvalcaba, quien mejoró recientemente dos veces el récord mexicano de 400 metros combinado individual –la segunda la semana pasada en el Campeonato Mundial de Curso Corto en Abu Dabi–, se convirtió junto con Ángel Martínez en los primeros mexicanos en llegar a la Liga Internacional de Natación, un circuito de otoño que les brinda fogueo y recursos económicos que abonan en su preparación.

“Fueron varios los que metieron su aplicación al draft de la Liga Internacional. Ángel y yo, por fortuna, fuimos aceptados, lo que es un gran honor. Ojalá en el futuro muchos más tengan la oportunidad. Queremos enseñarles que sí se puede y ojalá se unan más”, anotó Ruvalcaba, quien durante el circuito europeo estableció en Holanda nuevo récord mexicano para curso corto en los 400 combinados, de 4:11.25 minutos.

Ese fue sólo el aliciente para mejorar el absoluto mexicano a 4:10.83 en el Mundial de Abu Dabi, donde se quedó a 41 centésimas de avanzar a la final y clasificó en décimo puesto del orbe.

El tijuanense, quien durante la pandemia entrenó en una alberca armable y que recién concluyó su elegibilidad en la Universidad de Texas, lamenta lo que enfrentan la mayoría de los nadadores por el abandono y difícil relación con la acéfala Federación Mexicana de Natación.