Pobladores de Xoco ejercieron su derecho a la libre determinación como pueblo originario y retiraron ayer la valla metálica que obstruía el paso en la calle Real de Mayorazgo, colocada desde diciembre pasado por trabajadores del proyecto Mítikah en busca de ganar espacio de la vía pública, aseguraron.

Bajo el enorme edificio de 60 pisos, los vecinos se abrieron paso. Portaban martillos, mazos, pinzas y llaves con las que empezaron a desarmar la estructura de lámina y tubos de acero.

El trabajo fue intenso, pues se requirió de la fuerza de varios hombres para hacer el primer desmonte, que los pobladores de Xoco festejaron, luego de la resistencia que han emprendido en defensa de su territorio.

La calle Real de Mayorazgo cruza lo que queda del pueblo, de avenida Universidad a la México Coyoacán. En su trayecto tiene varias bifurcaciones para conectarse con otras vías, ya que se trata del principal camino de acceso que permite la movilidad en la comunidad.

Ante su importancia, los pobladores se oponen a que sea cedida al consorcio Fibra Uno, es decir a su privatización, por eso argumentaron que por mandato de la asamblea y tras notificar a las diferentes autoridades liberaron la vía pública.

Manifestaron que mantener la calle cerrada sólo era una forma para que la constructora ganara el espacio público, porque el tapial nada más cubría el daño que se ha hecho a las banquetas y al arroyo vehicular.

Tras la acción no descartaron represalias, la apertura de carpetas de investigación y quizá hasta detenciones, pese a ello manifestaron que el pueblo de Xoco resiste.

El asesor legal de los vecinos, Arturo Aparicio, manifestó que el retiro no es ilegal y está sustentado por la Constitución de la Ciudad de México, la federal y tratados internacionales que señalan que los pueblos originarios gozan de derechos especiales, particularmente hablamos de la libre determinación, pues por medio de asambleas emitieron una declaratoria general para empezar una serie de acciones en defensa de su territorio y todo se lo notificaron a las diferentes autoridades.

El también especialista en pueblos originarios agregó que al no responder las autoridades ni brindarles información, la asamblea ordenó recuperar esa calle.