Nueva York., Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Interna, declaró este lunes en la Casa Blanca que el nuevo gobierno de Joe Biden está desmantelando la crueldad de las políticas migratorias del gobierno anterior, se está contemplando permitir a las familias separadas de sus hijos permanecer en Estados Unidos y nombró a la coordinadora de la fuerza de trabajo para reunificar con sus hijos a más de 500 de esas familias.

Poco antes de la reunión virtual entre los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, el secretario de la dependencia que incluye las agencias de control migratorio y seguridad fronteriza, entre otras, denunció los extremos de crueldad contra migrantes por parte del gobierno de Donald Trump, y señaló que el ejemplo más poderoso y descorazonado de la crueldad que precedió este gobierno fue esa separación de familias en la frontera.

Tenemos un imperativo moral de reunificar a familias y restaurarlas a la mayor capacidad (sic) que pueda el gobierno de Estados Unidos, indicó Mayorkas, quien más tarde participó, junto con el secretario de Estado, Antony Blinken, en la reunión virtual entre López Obrador y Biden.

Agregó que se espera reunificar a esas familias en este país o en sus lugares de origen, y si optan por hacerlo en Estados Unidos se buscarán las avenidas legales para que puedan quedarse y que el gobierno asumirá todos los gastos de logística para cumplir con ese compromiso. Sin embargo, no ofreció la promesa de ciudadanía, señalaron algunos críticos, como la Unión Estadunidense por las Libertades Civiles.

Nombró a una veterana activista de derechos humanos, Michelle Brane, de la Comisión de Mujeres Refugiadas, para encabezar una fuerza de trabajo que tiene el objetivo de lograr la reunificación de los niños con sus familias.

No vengan

Detalló cómo está reconstruyendo todo el sistema migratorio que fue destruido por el gobierno anterior y que eso tomará tiempo. Por tanto, subrayó que el mensaje a todos aquellos que desean llegar a Estados Unidos es que se esperen, ya que ahora no pueden ser admitidos y apenas se están construyendo nuevos procesos para evitar cruces peligrosos. Indicó que hay avances inmediatos, incluyendo reabrir el proceso de asilo, empezando por los miles que fueron obligados a esperar en México.

A la vez, Mayorkas dijo que el reciente número de menores de edad no acompañados que cruzó la frontera representa un desafío, pero no una crisis para Estados Unidos, y explicó cómo se intenta abordar el asunto con una óptica más humanitaria que la anterior.

En la misma conferencia de prensa, la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, comentó que la propuesta de López Obrador para un nuevo programa de trabajador huésped sería un asunto que requiere la actuación del Congreso, y de esa manera no endosó la propuesta.