Los flujos de inversión extranjera directa (IED) se desplomaron 42 por ciento a escala global durante 2020, siendo México el país de América Latina menos afectado, reveló la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés).

Según datos del ente que pertenece a la Organización de Naciones Unidas (ONU), la inversión extranjera se ubicó en alrededor de 859 mil millones de dólares el año pasado, cifra inferior a 1.5 billones de dólares que se registraron en 2019.

El flujo de IED en 2020 es 30 por ciento inferior al mínimo que se registró en 2009, cuando sucedió la crisis económica global; además, es el monto más bajo desde los 90.

La UNCTAD prevé que 2021 seguirá siendo un año retador para el flujo de inversión en el mundo, debido a la pandemia de Covid-19, tanto que se espera otra caída en la IED –esta vez de 5 a 10 por ciento–, la cual podría tener una recuperación en forma de U, más lenta que la del comercio exterior y el producto interno bruto global, que se espera se reanime en V, pues los proyectos de inversión internacionales suelen reaccionar a las crisis con retraso.

El organismo refirió que los países en desarrollo fueron los más afectados, pues registraron una caída media en su IED de 69 por ciento, su peor nivel en 25 años. En tanto, en las economías desarrolladas la caída fue de sólo 12 por ciento.

Respecto de América Latina, informó que la caída en la IED tuvo un promedio de 37 por ciento, al ubicarse en 101 mil millones de dólares.

En detalle, señaló que el flujo de inversiones foráneas cayó 46 por ciento en Brasil, 76 en Perú, 49 en Colombia, 47 en Argentina y 21 por ciento en Chile.

En este contexto, la caída que registró México fue de sólo 8 por ciento, la más baja de la región, en parte, según la UNCTAD, por las ganancias derivadas de reinversiones; sin embargo, destacó que la industria automovilística nacional fue especialmente golpeada, con una caída de 44 por ciento en las inversiones.

Entre las grandes economías, China fue de las pocas que registró un aumento de IED durante el año pasado al llegar a 163 mil millones de dólares, 4 por ciento más respecto al año previo. Lo anterior, gracias a apoyos del gobierno a la entrada de capital extranjero.