La fracción de Morena en la Cámara de Diputados exigió que la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) dé a conocer resultados de la investigación que inició en 2016 sobre la posible colusión de los bancos que operan en el país para manipular el mercado de bonos de deuda gubernamental.

La pesquisa de Cofece por posibles prácticas monopólicas absolutas de esos bancos durante el periodo de 2010 a 2016 involucra las gestiones de Guillermo Ortiz y de Agustín Carstens al frente de Banco de México, y de José Antonio Meade Kuribreña y Luis Videgaray Caso al frente de Hacienda.

De comprobarse el ilícito los involucrados deberán ser sancionados de conformidad con la Ley Federal de Competencia Económica. Una práctica monopólica absoluta son arreglos entre agentes económicos, competidores entre sí, que tienen por objeto la manipulación de precios, restricción o limitación de la oferta o la demanda, división o segmentación de mercados, así como la concertación de posturas en licitaciones, entre otras. Si se comprueba la realización de estas prácticas la sanción puede alcanzar hasta 10 por ciento de sus utilidades anuales, expuso el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar.

Es decir, bancos y casas de bolsa habrían acordado manipular el precio de los valores gubernamentales (deuda del gobierno) y que sólo se comercializara una parte de estos valores.

El gobierno se financia por medio de estos instrumentos, colocando sus valores entre diferentes inversionistas, por lo que la manipulación de tasas estaría dañando tanto a las finanzas públicas del país como a los ahorradores e inversionistas; el daño a las arcas públicas sería millonario.