La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, pidió a los gobernadores de la Alianza Federalista ponerse a trabajar para el beneficio de sus comunidades, sobre todo en este momento de crisis económica y sanitaria que vive el país, y señaló que no sólo es inconstitucional romper el pacto federal, sino que no hay razón o argumento para ello.

La mandataria capitalina sostuvo que desde su perspectiva es un asunto meramente electoral, por lo que los gobernadores deberían dejarlo a sus partidos políticos para el momento en que inicien las campañas, porque ellos no son los que van a competir.

Señaló que no ha habido ningún tipo de favoritismo para alguna de las 32 entidades por parte del gobierno federal, como lo demuestran los apoyos que se han tenido para atender la pandemia por Covid-19. “Nos consta que independientemente del partido del que provengamos (…) ha habido una atención permanente a todos los gobiernos por parte de la Secretaría de Salud, del IMSS, del Issste y del Insabi”.

Discrepancias, a un lado

Añadió que en el caso de Chihuahua, que regresó al color rojo en el semáforo epidemiológico, está recibiendo todo el apoyo del gobierno federal, poniendo completamente de lado las discrepancias políticas en beneficio de sus habitantes, al igual que ha ocurrido en otros estados. Algunos han optado por algunas medidas, otros por otras, cada uno con nuestra autonomía, pero hemos recibido el apoyo del gobierno federal en todo momento.

Sheinbaum aseguró que lo mismo ha ocurrido en el caso de los recursos que se destinan a cada una de las entidades, pues la distribución se realiza de acuerdo con el número de población, y los apoyos que da el gobierno federal a los pobladores se hacen de manera directa.

En términos de las participaciones federales, se conserva el porcentaje que representa cada uno dentro de la Ley de Ingresos, refirió y precisó que también los gobernadores deben tomar sus medidas de austeridad y combate a la corrupción, para obtener más recursos.

Consideró que los gobernadores de Jalisco, Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Aguascalientes, Guanajuato y Michoacán están en su derecho de hacer una consulta para la permanencia de sus entidades en el pacto federal, pero no tienen ningún sustento constitucional.