Especialistas en educación y derechos humanos señalaron que la formación en ciudadanía debe realizarse no sólo a través de contenidos curriculares, libros de textos y saberes teóricos, sino con el ejercicio pleno de las libertades al interior de las escuelas y con el fortalecimiento de habilidades como la comunicación y la argumentación eficaz, el desarrollo del análisis crítico y la documentación, así como el trabajo cooperativo.

Durante el seminario Los futuros de la Educación. Aprender a Transformarse, sobre ciudadanía y participación, convocada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), expertos de México, Portugal y Argentina, señalaron que no se puede enseñar ciudadanía sin un ejercicio práctico de la misma.

Antonio Novoa, embajador de Portugal ante la Unesco indicó que la ciudadania no es sólo un principio. La ciudadania no existe únicamente en las palabras, sino en los hechos. No es posible enseñar a alguien a ser ciudadano sin ejercer la ciudadania, por lo que es central que la participación y la capacidad de decisión al interior de las escuelas y de las prácticas escolares sea una realidad, que los niños tengan realmente una capacidad de participación en las decisiones de la comundiad escolar.

Ana María Rodino, integrante del Comité Directivo de la red académica internacional ProLEER y experta en educación en derechos humanos, destacó que es necesario desarrollar las habilidades que permitan a los niños y adolescentes ejercer sus derechos, por lo que resulta fundamental que se impulse su capacidad para la comunicación y la argumentación eficaz, que son fundamentales para el ejercicio de la ciudadanía, al igual que el análisis crítico.

Por su parte, Inés Dussel, profesora-investigadora del Departamente de Investigaciones Educativas del Cinvestav, indicó que entre los desafíos para la educación en ciudadanía está el abordar fenómenos complejos como las noticias falsas, el ciberactivismo y la crisis de las propias democracias, que nos deben preparar para formar ciudadanos que puedan afrontar estas circunstancias, y no sólo visibilizar la ciudadania desde el enfoque del respeto a las leyes y la normatividad.