Daño moral y económico a familiares de pacientes
No hay evidencia de que el fármaco ayude a controlar el nuevo coronavirus, señala el director general de la Coordinación de los Institutos Nacionales de Salud
Lunes 3 de agosto de 2020, p. 4
Los médicos que recomendaron y pidieron a los familiares de enfermos de Covid-19 que compraran el medicamento tocilizumab incurrieron en una mala práctica clínica, una falta ética que provocó daños económicos y morales a las personas. Además, pudieron provocar graves daños a la salud de los pacientes porque no había ni hay evidencia de que ese producto tenga utilidad en el control del padecimiento, afirmó Simón Kawa, director general de coordinación de los Institutos Nacionales de Salud.
Dijo que quienes adquirieron el fármaco, antinflamatorio indicado únicamente para enfermedades autoinmunes como artritis reumatoide, gastaron miles de pesos porque se los recomendaron cuando estaban en una situación de vulnerabilidad, frente a una enfermedad potencialmente mortal, y con tal de salvar la vida de su familiar hicieron lo imposible
para conseguirlo porque es muy caro
. Tuvieron que empeñar el coche, sus bienes, pedir prestado, a pesar de que no hay ninguna evidencia de que el medicamento sea útil, subrayó.
La semana pasada el laboratorio Roche informó sobre los resultados del ensayo clínico fase 3 con su producto tocilizumab y reconoció que no hubo evidencia de utilidad contra el Covid-19. No disminuye la mortalidad ni mejora la condición clínica de enfermos graves.
Por eso ayer, en la conferencia vespertina en Palacio Nacional, el doctor Kawa exhortó a que no se utilicen medicamentos que no hayan comprobado su eficacia mediante ensayos clínicos controlados.
Puntualizó que tampoco se recomienda el uso de terapias con células madres, dióxido de cloro, ivermectina, nitazoxamida, azitromicina ni oseltamivir
Subrayó que uno de los principios básicos de la medicina es no causar daño a los pacientes, y eso no lo cumplieron quienes han recomendado la utilización generalizada de tocilizumab.
El especialista comentó sobre los ensayos clínicos que se realizan en México luego del reporte que dio cuenta de 4 mil 853 nuevas confirmaciones de Covid-19, con las cuales el registro nacional de casos llegó a 439 mil 46, mientras las defunciones aumentaron en 274 entre sábado y domingo para un total de 47 mil 746.
El doctor Kawa recordó que, hasta ahora, solamente la dexametasona ha demostrado efectividad en el tratamiento de personas hospitalizadas que requieren oxígeno suplementario, en dosis específicas.
Respecto de los estudios en curso, comentó que son cuatro: remdesivir (antiviral) en combinación con baricitinib (antinflamatorio) para el que se han reclutado 68 pacientes, y plasma de convaleciente para evaluar la capacidad de neutralización del nuevo coronavirus.
El especialista resaltó que hasta ahora se ha detectado que 40 por ciento de los plasmas donados por personas que se recuperaron de Covid-19 no tienen los anticuerpos con la suficiente capacidad para neutralizar el virus. De ahí que antes de transfundirlo a los pacientes se debe comprobar su potencial mediante pruebas de laboratorio.
En México también se investiga si el antiviral favipiravir detiene la progresión de la enfermedad y evita que los afectados requieran ser intubados. En otro ensayo se combina con maraviroc (antiviral), éste capaz de modular la respuesta inflamatoria del sistema de defensas del organismo. Esa inflamación es la causante del daño pulmonar en los pacientes, explicó.