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Cultivar el tango por streaming implica un desafío, pues su esencia es el abrazo

Cuando la pandemia quede atrás, se bailará con cubrebocas en pleno Buenos Aires // Los hombres lo llevarán de seda, en lugar de un pañuelo, expresan maestros de esa danza

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▲ Natalia Fossati y Juan Güerri imparten una clase por Zoom desde su departamento.Foto Xinhua
 
Periódico La Jornada
Lunes 3 de agosto de 2020, p. a12

Buenos Aires., El tango, la emblemática danza del río de la Plata, se ha reinventado en Argentina con clases virtuales y espectáculos en línea, mientras espera que reabran las tradicionales milongas, recintos de baile que debieron cerrar en marzo por la pandemia de Covid-19.

Hoy escogimos la virtualidad, porque ella nos eligió a nosotros; no es algo determinado por el tango. Cuando el aislamiento sea normalidad, nuestro género va a tener una opción más en este formato, afirmó Juan Güerri, vicepresidente de la Asociación de Maestros y Bailarines de Tango Argentino.

El profesional, quien baila tango desde comienzos de la década de 1990 y es docente en la Universidad del Tango de Buenos Aires, remarcó que el género es el primero de abrazo en la historia de las danzas sociales.

“Evitar el abrazo es hacerlo con el tango propiamente dicho. Como alternativa, aparecen las clases y los festivales por Internet, o streaming, parte de lo que puede proponer una pareja que baila tango, siempre y cuando conviva bajo un mismo techo”, enfatizó.

La cuarentena que rige en Argentina desde marzo para evitar la propagación del Covid-19 supuso el cierre por tiempo indeterminado de las milongas, muchos de los aficionados ahora ofrecen clases por redes sociales, algunos para tener un ingreso económico, otros para mantener encendida la pasión por la danza que identifica a Buenos Aires.

Buscamos alternativas y las estamos usando. Por eso hay festivales en el mundo que se plantean en línea. Aparece así la posibilidad de contar algo desde una pantalla, de manera individual o grupal, resaltó el también integrante de la generación intermedia de la Academia Nacional del Tango.

Vinculado con lo social

Natalia Fossati, directora de Tango & Tango, productora de actos y espectáculos del género, aseguró que la nueva normalidad supone un desafío, porque la esencia cultural del tango es el abrazo y el contacto cara a cara.

El tango surgió como un modo de expresión de una comunidad determinada y siempre estuvo vinculado con lo social. Las milongas son el espacio privilegiado donde circula la cultura del tango, un sitio donde nos juntamos, nos cruzamos y nos abrazamos con todos, explicó la docente, pareja de Güerri, con quien baila tango desde comienzos de los años 90.

La mujer, integrante también de la generación intermedia de la Academia Nacional del Tango, destacó que la danza emblemática de Argentina y de Uruguay siempre se resistió a la virtualidad y a la posmodernidad. Lo atractivo del tango es que siempre propone un encuentro real, del que no te puedes escapar por WhatsApp.

Fossati valoró que la pandemia obligó a los cultores del tango a descubrir nuevos caminos y formatos, con videos y grabaciones, aunque siempre es necesaria la presencia del otro: Uno puede dar una clase por Zoom y el tango, nos unen igual, aunque el otro esté del otro lado de la pantalla.

Al comentar cómo será volver a una milonga cuando la pandemia quede atrás, Güerri imaginó gente bailando con cubrebocas en pleno Buenos Aires y viendo quién tiene el más elegante. En vez de tener un pañuelo de seda al cuello, el hombre va a tener un cubrebocas de seda. Lo que no puede pasar es que se cambie el baile. Eso no va a pasar, no tiene que pasar, sostuvo.

No sabemos cómo será volver

Las milongas cerraron el 11 de marzo y por eso todo el mundo está pensando cómo volver y qué hacer. La mayoría de los bailarines están organizándose, buscando generar un colectivo particular, con su problemática, porque saben que va a tardar mucho en volver el tango. En Europa ya están bailando; hacen exhibiciones y milongas, con poca gente y ésta con cubrebocas, resumió el bailarín.

Fossati, por su parte, auguró que al principio habrá una situación de desconfianza. Al volver a una clase tratarás de mantener la misma pareja, pero ir a una milonga es ir a compartir con otros. No sabemos cómo será volver.