La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que en la Ciudad de México también se investiga un caso de presunta corrupción entre jueces federales y la delincuencia organizada, el cual será presentado a la Fiscalía General de la República (FGR) y a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

En su videoconferencia, en la que informó que además del secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, hay otro funcionario de su gabinete amenazado por grupos delictivos, la mandataria consideró que se tiene que hacer una revisión exhaustiva dentro de las instituciones de justicia, tanto locales como federales, pero en particular en el Poder Judicial Federal (PJF), que es el que se encarga de los casos de la delincuencia organizada.

En su opinión, el soborno a integrantes de un juzgado para liberar a José Ángel N El Mochomo –quien está vinculado con la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa–, evidenciado en una grabación telefónica, es algo que no se debe tolerar en el país.

Agregó que acabar con la corrupción y llegar a la paz y la seguridad no es una tarea exclusiva de los gobiernos, sino que deben participar las fiscalías y el Poder Judicial.

En el caso de la ciudad, recordó el operativo en Peralvillo 33, en el que un juez federal, por un tecnicismo, liberó a los detenidos.

Respecto a las amenazas contra funcionarios, aseguró que se han tomado las medidas para resguardar su seguridad y se continúa, por parte de la Fiscalía de Justicia local, en la investigación del atentado en contra del jefe de la policía capitalina con el apoyo de su par federal.

Sobre el caso, se supo que el detenido tras el atentado al jefe de la policía capitalina en las Lomas de Chapultepec, identificado como jefe de sicarios del cártel Jalisco Nueva Generación en Tonalá, conocido como El Vaca, mintió al declarar que se llamaba José Armando Briseño de los Santos.

Al realizar la revisión de fichas criminales y la identificación de huellas dactilares, las autoridades capitalinas descubrieron que su nombre real es Juan Miguel N, quien además bajó más de 30 kilos para evitar ser reconocido.

El sobrenombre se atribuye al peso que tenía hasta hace unos meses, pero en Jalisco se sometió a un tratamiento para bajar y no ser identificado por las autoridades capitalinas, indicaron fuentes cercanas a la indagatoria.

El Vaca es originario de Puerto Vallarta, Jalisco, y fue detenido en un domicilio de la colonia Santa Catarina, en Tláhuac, junto con su pareja sentimental Miriam y otras tres personas.