Jueves 21 de mayo de 2020, p. 6
Las disparidades salariales en el sistema de salud mexicano han resultado que en medio de la pandemia de Covid-19 un médico general adscrito a la nómina de IMSS-Bienestar gane mensualmente 7 mil 941 pesos, sin prestaciones sociales, mientras un director general adjunto de la Secretaría de Salud –plazas que no deberían existir desde el año pasado, según instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador– percibe ingresos por 115 mil 220 pesos brutos, 14 veces más, exhiben datos oficiales.
Sin embargo, hay trabajadores que se encuentran muy por debajo de este bloque de remuneraciones, como los residentes adscritos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), médicos generales en estudios de especialidad con programas que son de tiempo completo y una parte de éste en servicio hospitalario. Su pago se resume a un apoyo mensual de 2 mil 288.82 pesos, menos de un salario mínimo, con lo que ocupan la remuneraciones más bajas en las nóminas de las instituciones de salud.
No obstante, las remuneraciones que se estancan en un salario mínimo son la regla general en el personal de limpieza, la mayor parte sin otra prestación documentada por las nóminas transparentes que publica el gobierno federal. En cuanto a las percepciones de camilleros y de personal de enfermería, llegan a no superar los dos salarios mínimos al mes.
Las contrataciones por honorarios son extendidas en la administración pública en los salarios de menor nivel. Si bien en el sector central de la Secretaría de Salud el personal cuenta con remuneraciones extra al salario neto, en los hospitales e institutos de salud que se coordinan por la dependencia no se repite esto, como el caso de los hospitales General, Manuel Gea González y Salvador Zubirán, así como el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias.
Algo similar ocurre en IMSS-Bienestar, donde apenas uno de cada 10 trabajadores cuenta con una contratación por honorarios y en todos los casos esto se refleja en el personal de menores ingresos.
En el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado la mitad de los empleados en nómina –36 mil 574 de 65 mil 535– no tienen remuneraciones extra al sueldo neto, y en el IMSS 79 por ciento de quienes laboran se encuentran en la misma condición.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, México cuenta con los salarios promedio más bajos de la región para todo personal de salud. Los 21 mil 343.99 dólares al año que ganan estos trabajadores –independientemente de si se ocupan en el sector privado o público– representan casi un tercio de lo que se percibe en Chile.