Lunes 4 de mayo de 2020, p. 25
Madrid. Reporteros sin Fronteras (RSF) conmemoró ayer el Día Mundial de la Libertad de Prensa, y recordó a los más de 300 periodistas encarcelados en el mundo con el lema: Periodismo en confinamiento
, en referencia a las actuales medidas de reclusión por el Covid-19.
En muchos países puedes acabar en la cárcel por contar la realidad, contradecir al poder, indagar corruptelas o, simplemente, por expresarte de forma individual
, lamentó la organización.
RSF recuerda particularmente a informadores como el bloguero Raif Badawi, quien lleva más de siete años preso en Arabia Saudita por insultar al islam
, o a Narges Mohammadi, periodista y activista iraní, defensora de derechos humanos, en prisión desde mayo de 2015.
También mencionó a periodistas como los yemeníes Abdul Khaleq Amran, Akram Al Walidi, Hareth Hamed y Tawfiq Al Mansouri, condenados por la insurgencia hutí con arbitrariedad
y quienes pueden ser ejecutados en cualquier momento.
Este 3 de mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, pedimos nuevamente la libertad de todos los informadores profesionales o ciudadanos, blogueros y colaboradores de medios que están entre rejas por ejercer el periodismo, por contribuir al libre flujo de la información
, señaló.
RSF tiene constancia en lo que va de 2020 de 10 periodistas asesinados, 229 en la cárcel, 116 internautas entre rejas junto con 14 colaboradores en el mundo.
La Unión Europea alertó este fin de semana de ataques a los medios de comunicación en varios países usando la pandemia del nuevo coronavirus como coartada.
África tampoco queda exenta. Human Rights Watch denunció que las autoridades de Somalia lanzaron una campaña de intimidación a los periodistas del país al amparo de la lucha contra la pandemia en la nación africana.
A pesar de los riesgos y desafíos adicionales derivados de la crisis sanitaria, los periodistas de todo el mundo continúan con su trabajo, a veces en circunstancias difíciles
, agregó.
Son demasiados los países donde los periodistas tienen que lidiar con una legislación restrictiva, a veces atribuida a la emergencia, que frena la libertad de expresión y la libertad de prensa
, concluyó.