La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que hasta ahora no hay riesgo de desabasto en la Central de Abasto y que dicho mercado no va a cerrar sus puertas, pero sí se están reforzando las medidas para evitar la propagación de contagios.

Dijo que se trabaja con todos los actores del mercado mayorista y la información que se está dando es para evitar mayores contagios en una zona que no se puede cerrar. Hasta el momento no tenemos ningún reporte de desabasto en la Ciudad de México que implique algún problema, expresó.

Lo mismo, agregó, ocurre con los negocios afiliados a la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales y de los propios mercados públicos, donde también se están aplicando medidas para inhibir contagios.

Desde esta semana se establecieron filtros de control en el mercado mayorista más grande de América Latina, donde elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana toman la temperatura a las personas que ingresan y verifican que porten cubrebocas.

Mientras, en los andenes, donde se ha registrado una disminución de usuarios, personal de la Secretaría de Gobierno toma nuevamente la temperatura a quienes caminan por los mismos, a quienes se les obsequia gel antibacterial, y aunque no ha concluido la instalación de las carpas de consulta, sí generan miedo, indicaron consumidores.

Bodegueros y comerciantes señalaron que en los días recientes ha habido una reducción y cancelación de viajes de productores y proveedores, así como aumentos en los precios de productos básicos de hasta 300 por ciento, además de que las caídas en las ventas han provocado el cierre de bodegas y el remate de mercancía.

En 15 días, en la Ciudad de México habrá desabasto, aunque las autoridades lo quieran negar, advirtió Pablo Ortega de los Santos en un recorrido por los andenes, donde se observaron contados clientes y el cierre de decenas de bodegas y locales comerciales.