Domingo 8 de marzo de 2020, p. 19
Pekín. Las exportaciones de China se desplomaron en enero y febrero pasados debido al cierre de fábricas para contener el nuevo coronavirus, mientras las importaciones declinaron en un margen menor.
Los envíos al exterior descendieron 17.2 por ciento en comparación con el mismo periodo del año previo a 292 mil 400 millones de dólares, marcado contraste con el incremento de 7.8 por ciento en diciembre, según estadísticas de aduanas difundidas ayer.
Las importaciones declinaron 4 por ciento, a 299 mil 500 millones de dólares, en contraste con el aumento de 16.3 por ciento en diciembre.
Las exportaciones chinas son parte relevante de las cadenas globales de suministro en una economía cada vez más integrada internacionalmente.
El comercio apuntaba a un incremento después de que Pekín y Washington, en una especie de tregua, eliminaran en forma bilateral sus aranceles punitivos a algunas mercancías.
Pero esos incrementos fueron contrarrestados por las medidas de control contra el nuevo virus que paralizaron a finales de enero parte de la segunda economía más grande del mundo.
Las exportaciones a Estados Unidos cayeron 27.7 por ciento en enero y febrero, a 43 mil millones de dólares, empeoramiento respecto de la declinación de 12.5 por ciento en diciembre.
Las importaciones de mercancías estadunidenses subieron 2.5 por ciento, a 17 mil 600 millones de dólares, pero de todas formas China registró un superávit comercial de 25 mil 400 millones con Estados Unidos.
La balanza comercial de China cayó a un déficit de 7 mil 100 millones de dólares en los dos primeros meses del año.
La agencia aduanera comenzó a reportar las cifras comerciales de enero y febrero juntas para eliminar el impacto de las vacaciones por las festividades del Año Nuevo Lunar, que caen en diferente época cada año durante ese periodo.
Las fábricas, por lo general, cierran dos semanas o más por las festividades, mientras sus empleados visitan sus lugares de origen.
Las importaciones suben usualmente después de las festividades, en la medida en que las fábricas reabastecen las existencias.
El repunte de este año se aplazó debido a la ampliación de las vacaciones en al menos una semana y más en algunos lugares para mantener a las fábricas y oficinas cerradas dentro de los intentos de las autoridades por contener la propagación del coronavirus.