Zacatecas, Zac., El gobierno de Zacatecas designó a Ignacio López Flores, general de brigada retirado, director del Centro Regional de Reinserción Social (Cerereso) de Cieneguillas, en sustitución del también militar Antonio Solís Álvarez, quien se desempeñó en ese cargo año y medio, hasta las riñas de diciembre pasado que dejaron un saldo de 18 internos muertos y 15 heridos de gravedad.

Luego de más de cuatro décadas de carrera militar, López Flores empezó a trabajar en centros penitenciarios: en 2014 estuvo en el penal de Tabasco; de septiembre de 2016 a junio de 2017 fue director general de Prevención y Reinserción Social en la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas, y de agosto de 2017 a febrero de 2018 director del Cereso de Oaxaca.

Durante el acto de nombramiento, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas, Ismael Camberos Hernández, reconoció el trabajo que Antonio Solís Álvarez desempeñó al frente del penal de Cieneguillas, a pesar de los recientes actos violentos, en los que se utilizaron armas de fuego y punzocortantes.

La senadora Geovanna Bañuelos de la Torre, coordinadora parlamentaria del grupo del Partido del Trabajo (PT), solicitó a las instituciones de seguridad y justicia de Zacatecas un informe sobre los hechos del 31 de diciembre de 2019 y el 2 de enero de 2020 en la penitenciaría.

En un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la legisladora zacatecana pidió a los titulares de la Fiscalía General de Justicia del Estado y de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, Francisco José Murillo Ruiseco y Salvador Eduardo Villa, respectivamente, informar sobre los avances de las investigaciones acerca de las riñas.

A las autoridades del Cerereso de Cieneguillas les exigió informar sobre la situación actual del centro penitenciario y el estado de salud de los reos lesionados.

Para el grupo parlamentario del PT resulta urgente formular una política penitenciaria que prevenga, controle y sancione a los custodios y funcionarios corruptos, sostuvo.

Bañuelos de la Torre señaló que la situación del referido penal es resultado de una serie de hechos trágicos sin atender: en 2009, 53 reos se fugaron; en 2012 una riña dejó cuatro muertos y en 2016 la directora del Cerereso, Fabiola Quiroz, fue secuestrada y desaparecida.

En 2017, añadió, hallaron una granada de fragmentación y ocurrió otra fuga. En 2018 mataron al jefe de custodios, y el pasado 30 de diciembre se confiscaron armas, teléfonos y drogas.