Los miembros de la junta de gobierno del Banco de México (BdeM) auguran que la debilidad económica que envuelve al país continuará a la largo de 2020, toda vez que prevén una recuperación modesta.

En su minuta de la reunión de política monetaria en la que el pasado 19 de diciembre bajaron la tasa de referencia a 7.25 por ciento, coincidieron en que persisten riesgos para la inflación y para la economía en caso de una baja a la nota soberana.

Según el documento, los miembros de la junta mencionaron que si bien la información disponible para el cuarto trimestre de 2019 es limitada, se estima que persista la debilidad que se ha venido registrando por varios trimestres, y coincidieron en que la economía sigue estancada.

Casi todos señalaron que el estancamiento ha implicado la ampliación en terreno negativo de las condiciones de holgura de la economía respecto a lo observado en el trimestre previo. Incluso, uno advirtió que su magnitud es preocupante y dijo que la actual brecha negativa del producto es, por mucho, la mayor desde la crisis global de 2009.

La mayoría de los integrantes mencionó que las perspectivas de crecimiento económico del país están en línea con lo publicado en el Informe trimestral julio-septiembre 2019. Respecto de las previsiones para 2020, indicaron que esperan una recuperación modesta de la economía mexicana.

Sobre los riesgos que enfrenta la economía, destacaron la incertidumbre acerca de la calificación crediticia de Pemex. Uno apuntó que persisten retos de gran trascendencia cuya solución está todavía pendiente y recalcó la potencial implicación de la pérdida del grado de inversión de dicha empresa, tanto para las finanzas públicas como para la calificación crediticia soberana.

En este sentido, resaltaron que es importante que además de seguir una política monetaria prudente y firme, se impulse la adopción de medidas que propicien un ambiente de confianza y certidumbre para la inversión. Asimismo, señalaron que es indispensable fortalecer el estado de derecho, abatir la corrupción y combatir la inseguridad.

Por otro lado, algunos miembros de la junta señalaron que la evolución del mercado laboral ha reflejado la debilidad de la economía. En particular, hay información que sugiere que la política salarial ha comenzado a inhibir la generación de empleos formales, lo que también puede debilitar la actividad económica.

Tales distorsiones se verán acentuadas como resultado del aumento al salario mínimo del 20 por ciento a partir de 2020, dijo un funcionario del banco central.

Analistas de Citibanamex señalaron que el hecho de que la junta de gobierno crea que el deterioro en los indicadores de empleo no sólo es resultado de una economía estancada, sino también de la trayectoria creciente de los salarios, acentúa las preocupaciones sobre el anuncio reciente del aumento de 20 por ciento al salario mínimo.

Por el lado de los precios, en el documento se reconoce que la inflación ha disminuido a un ritmo mayor que el anticipado, aunque también persiste la incertidumbre sobre el efecto de algunos factores que incidirán en los precios durante 2020.

El disidente

Las minutas del BdeM revelaron que en esta ocasión el subgobernador Gerardo Esquivel votó por reducir la tasa de interés a un nivel de 7 por ciento, es decir, propuso un recorte de medio punto.

Considero que la coyuntura en la que se tomó esta decisión era quizá una de las últimas oportunidades favorables de este ciclo para poder realizar un ajuste más decidido en la política monetaria, argumentó Esquivel.

Desde su punto de vista reducir la tasa de interés en 25 puntos base es insuficiente para reconocer los avances que se han logrado en materia de reducción de la inflación y de mitigación de riesgos en meses recientes.

Alejandro Díaz de León, Irene Espinosa, Javier Guzmán y Jonathan Heath votaron por bajar un cuarto de punto.