Valparaíso. Unas 200 casas resultaron afectadas por un incendio forestal que se desató antier en el turístico puerto de Valparaíso, en el litoral central de Chile, que dejó a decenas de familias sin hogar en medio de las fiestas navideñas.

El siniestro afectó los cerros Rocuant y San Roque en la parte alta de la comuna de Valparaíso (unos 120 kilómetros al oeste de Santiago) y ayer se mantenía activo pero con menor intensidad, mientras el número de casas afectadas por el fuego subió de 150 a 200 en cuestión de horas, declaró Gonzalo Blumel, ministro del Interior, en el último informe de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) en Santiago.

Los daños en las viviendas aún no han sido evaluados, indicó la Onemi.

Blumel anunció que presentará una querella ante indicios de que el fuego fue provocado.

En redes sociales circula un video en el cual se ve a personas y un vehículo cerca de donde comenzó el incendio.

En total, unas 150 hectáreas han sido devastadas por el fuego que deja un panorama desolador en los barrios de los cerros afectados con decenas de casas –en su mayoría de construcción ligera de madera y lata– reducidas a escombros de los que emanaban pequeñas columnas de humo, y en muchas de las cuales vive más de una familia en precarias condiciones.

La emergencia dejó 12 voluntarios de bomberos lesionados que han tenido que enfrentar la difícil geografía donde se produjo la emergencia, entre quebradas y cerros. De igual forma, se mantienen mil 715 clientes sin servicio de suministro eléctrico en la región, indicó la Onemi.

Otro incendio forestal también se mantiene activo y consume una superficie aproximada de nueve hectáreas de vegetación, informó la oficina de emergencia.

Los dos siniestros son combatidos por 25 brigadas forestales civiles y militares, 12 unidades de bomberos, siete aviones cisterna y de observación y 11 helicópteros, detalló el organismo.

El incendio en Valparaíso no ha dejado víctimas y comenzó en medio de pastizales y arboledas, pero avanzó rápidamente hacia zonas pobladas, por lo que la policía, bomberos y el ejército desalojaron a decenas de familias, algunas de las cuales debieron pasar la noche de Navidad en albergues.

Estábamos preparando todo para pasar las fiestas cuando comenzó el incendio. No alcanzamos a sacar nada. Es muy complicado, más que todo por los niños, contó a Afp el residente Fabián Olguín.