Domingo 1º de diciembre de 2019, p. 30
Mujeres del Frente Nacional para la Sororidad y defensoras digitales se manifestarán frente al Congreso local para exigir a los legisladores que no retrasen la votación, discusión y aprobación de la conocida como ley Olimpia, con la que se pretende incrementar sanciones penales de cuatro a seis años –y con agravantes hasta nueve– de prisión para quienes difundan en redes sociales o páginas electrónicas imágenes con contenido íntimo sin consentimiento.
Se trata de reformas al Código Penal y a la Ley de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia, llamada ley Olimpia, luego de que mujeres que pertenecen a 20 organizaciones de diferentes entidades presentaron ante autoridades y legisladores casos de feminicidios cuyas víctimas padecieron violencia digital, considerada por las activistas como un delito.
Paulina Zepeda, integrante del frente, dijo que es importante que se legisle sobre el derecho al olvido, luego de que contenido íntimo de mujeres subido por sus ex parejas a algún medio digital tiene repercusiones no sólo en el contexto familiar y afectivo, sino en el ámbito laboral, porque existen casos de jóvenes que fueron despedidas de sus trabajos y boletinadas, pues no encuentran otro empleo.
Por su parte, Olimpia Coral, integrante del frente, expresó que estarán desde antes de las nueve de la mañana frente al Congreso con la esperanza de que la ley sea una realidad
, por lo que dijo que en paralelo sigue la revisión de 57 casos de mujeres que presentaron una demanda ante la Procuraduría General de Justicia por ser víctimas de violencia digital.
Los legisladores de las comisiones unidas de Administración y Procuración de Justicia e Igualdad de Género tienen listo el dictamen que presentarán ante el pleno durante la sesión del martes, por lo que las activistas se reunirán afuera y exigirán ingresar al recinto legislativo para presenciar la discusión y la votación.
La ley Olimpia ya fue aprobada por los Congresos de 13 entidades, mientras en Hidalgo se avanza en su discusión. Esa iniciativa tuvo su origen en Huauchinango, Puebla, donde se difundió contenido digital íntimo de la joven Olimpia Coral sin su consentimiento.