Por unanimidad, con 114 votos en favor y ninguno en contra, el Senado aprobó reformas a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, para prohibir el uso del castigo corporal en todos los ámbitos, ya sea como método correctivo o disciplinario.

En el dictamen aprobado se señala que el castigo corporal y otras formas humillantes de castigo son todavía usadas como medios de disciplina. En México, al menos seis de cada 10 niñas, niños y adolescentes, de entre uno y 14 años, ha experimentado algún método de disciplina violenta.

De igual forma, se destaca que sólo en la Ciudad de México, Zacatecas y Chiapas se prohíbe específicamente el castigo corporal en sus leyes, mientras Guanajuato lo proscribe en sus códigos penales.

Se detalla que el Unicef estimó, en su informe 2017, que uno de cada 15 niños ha recibido alguna forma de castigo físico severo (jalones de orejas, bofetadas, manotazos o golpes fuertes) como método de disciplina.

La presidenta de la comisión de los Derechos de la Niñez y la Adolescencia, la panista Josefina Vázquez Mota, señaló que el Unicef afirma que la incidencia de niñas que son asesinadas en sus casas es cuatro veces mayor que el de varones.

Ana Lilia Rivera, senadora de Morena y presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda, recordó que el Unicef hizo un llamado a los gobiernos que forman parte de ese organismo internacional para prohibir el castigo corporal en todas sus formas, toda vez que constituye un trato cruel inhumano.