Chihuahua, Chih., El ayuntamiento de Chihuahua ha utilizado todo tipo de facultades y artimañas para inducir el voto de los alrededor de 700 mil ciudadanos convocados a votar este domingo, en un plebiscito con carácter vinculante para decidir la privatización del alumbrado público y, en consecuencia, el pago de 6 mil 200 millones de pesos por la concesión del servicio a 15 años a un particular, denunciaron el colectivo Chihuahua Decide y ciudadanos que solicitaron la consulta.

Informantes explicaron que el municipio capitalino pretende usar el derecho de alumbrado público para contratar esa deuda tomando de base contratos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que no fueron actualizados en tres años.

En abril pasado, la alcaldesa María Campos Galván y los regidores panistas aprobaron contratar la deuda como parte de un proyecto de concesión del alumbrado público, compuesto por alrededor de 81 mil luminarias; sin embargo, requieren el aval del Congreso del estado, pero los legisladores rechazaron aprobar el crédito hasta que el Instituto Estatal Electoral realice el plebiscito.

La edil Campos Galván argumenta que el sistema de alumbrado es obsoleto y la concesión y deuda permitirán cambiar las lámparas de vapor de sodio por lámparas led, además de instalar luminarias en colonias que carecen de ellas, sin gastar los recursos del municipio porque con el derecho de alumbrado público se pagará el crédito.

Arturo García Portillo, coordinador del proyecto Iluminemos Chihuahua, reconoce que el ayuntamiento pidió el crédito sin presentar especificaciones técnicas, y lo hará al momento de lanzar la licitación para la concesión de la red de alumbrado público.

Dijo que cambiar las luminarias y la renovación de la red costará de mil a mil 200 millones de pesos, y la alcaldesa Campos explicó que solicitan deuda por 6 mil 200 millones de pesos porque entregarán al concesionario, por adelantado, el pago de energía eléctrica de los próximos 15 años; no es una sustitución de foquitos, es el cambio de toda la infraestructura y el suministro de la energía eléctrica, esto quiere decir, que toda la luz que paga el municipio cada año va incluida.

Los ciudadanos que solicitaron la consulta denunciaron que Desarrollo Humano y Educación municipal moviliza a sus empleados en las colonias para levantar encuestas sobre el plebiscito, pedir la credencial de elector a los vecinos y dar información falsa sobre el mecanismo de consulta. Asimismo, paga anuncios espectaculares, de radio y publicidad en redes sociales y simula encuestas telefónicas para promover el Sí con recursos públicos que el Instituto Estatal Electoral anunció no fiscalizará, lo que pone en desventaja a los ciudadanos que promueven el No al proyecto.

Acortan difusión de consulta

Además de cuestionar la inequidad, Chihuahua Decide denuncia que la autoridad electoral incumplió los principios de máxima difusión y máxima participación, porque cedió ante las presiones políticas del municipio de Chihuahua y otorgó sólo 33 de los 90 días estipulados en la Ley de Participación Ciudadana para la difusión de las opciones a favor y en contra de la concesión del alumbrado público.

También señalan una triangulación de recursos municipales desde la Secretaría de Hacienda estatal para financiar la consulta y adelantar la fecha a este domingo 24 de noviembre, porque al pagar el plebiscito, el ayuntamiento forzó a que el Instituto Estatal Electoral no tuviera que esperar al próximo año para recibir presupuesto propio.

Chihuahua Decide y demás denunciantes señalan que el proyecto, llamado Iluminemos Chihuahua busca concesionar el alumbrado público a un solo empresario y a través de un único proceso de licitación, el ayuntamiento dice que no tiene dinero y presenta cifras que no corresponden al gasto de electricidad de las luminarias, porque omitió renegociar contratos con CFE.

Explicaron que el municipio de Chihuahua debió cambiar los contratos con CFE de tarifa fija a servicio medido y sólo una parte de la red de alumbrado público paga la tarifa APMT (alumbrado público en media tensión), además, para calcular el monto de la deuda por 6 mil 200 millones de pesos no se realizó un censo de luminarias y se ocultó la cifra exacta de lámparas que integran la red y consumen energía.

Por esa y otras razones pidieron al ayuntamiento que antes de contratar deuda y privatizar el servicio instale balastras con menor pérdida de energía, relojes electrónicos para encendido según el tiempo efectivo de horas de la noche y atenuadores de potencia en horarios con menor tráfico peatonal o vehicular.

Añaden que el derecho de alumbrado público es un cobro inconstitucional que CFE no está obligado a hacer, y utilizarlo como garantía para el pago de una deuda a 15 años terminará comprometiendo los recursos del municipio, además, el plazo del crédito es excesivo y deberá pagarse durante las cinco administraciones siguientes.

“El ayuntamiento está malgastando los recursos de las personas de Chihuahua para forzar el Sí; llevan meses con una campaña de publicidad con información falsa y pagada con recursos públicos”, dijeron Carlos Olvera y Valeria Villalobos, integrantes del colectivo mencionado.

Este año, por cada cien pesos que el municipio gastó en inversión pública usó otros 65 pesos en publicidad, un aumento de más de 300 por ciento respecto a lo que gastaron el año anterior; al mes de septiembre han gastado 57 millones de pesos en publicidad y la campaña para promover la concesión del alumbrado público.

Ante las inconsistencias en la organización del plebiscito y la campaña previa a la jornada de votación, el colectivo Chihuahua Decide convocó a los ciudadanos a participar y votar por el No y sumarse a una red para cuidar los votos y vigilar el proceso electoral que se realizará este domingo.