Vendedores acaparan calles y banquetas y bloquean entradas de negocios
Jueves 21 de noviembre de 2019, p. 35
De cara a las festividades decembrinas, el comercio ambulante se ha desbordado en calles del Centro Histórico, a grado tal que vialidades del perímetro A, que ya habían sido liberadas, son ocupadas en su totalidad por puestos de todo tipo de mercancías.
Es el caso de las calles República de Argentina, desde el Eje 1 Norte hasta República de Perú, y Apartado, desde República de Perú hasta República de Venezuela, donde los comerciantes han acaparado los carriles e impiden la circulación vial. La expansión de los vendedores en la vía pública prácticamente tienen sitiados
a los habitantes de la zona, quienes señalaron que no hay acceso para que entren ni las unidades de emergencia.
Otra situación similar ocurre en el Eje Central Lázaro Cárdenas, de Salto del Agua a Madero, donde se puede observar sobre las aceras alrededor de 800 vendedores con rejillas con ropa, calzado, accesorios de telefonía y artículos de la temporada navideña.
En Correo Mayor y El Carmen, donde sí está permitido el uso de rejillas, por las que los vendedores pagan entre 200 y 300 pesos diarios a los líderes de sus organizaciones, han saturado incluso las paredes de los negocios establecidos hasta con dobles líneas con estos artefactos, ante la llegada de miles de visitantes que buscan hacer por anticipado sus compras decembrinas.
Otras calles invadidas son Venustiano Carranza, Jesús María, Regina y Mesones. Estas dos últimas, cuentan los vecinos, habían tenido cierta contención, pero desde la temporada escolar, desde Pino Suárez a Las Cruces, los puestos con artículos escolares no se han movido.
En la explanada de la estación Pino Suárez del Metro se contabilizaron hasta 300 vendedores ambulantes, y sobre la avenida Izazaga, hasta el Eje Central y sus calles perpendiculares, se puede observar otra cantidad similar.
En otro el extremo, frente a la Alameda Central, en la recién remodelada calle Dolores, que aloja al barrio chino, alrededor de 80 puestos, sobre todo de comida, se extienden desde Independencia hasta Ayuntamiento.
Lo mismo ocurre en la calle López, donde los habitantes señalaron que sólo estaba permitido el comercio frente al mercado de San Juan, pero hay 120 puestos de alimentos, incluso sobre la vialidad.
Los vecinos explicaron que las autoridades dividieron en cuadrantes la atención para el Centro Histórico, pero los operativos sólo se realizan en los sitios donde tienen mayor presión, como el corredor financiero, en las calles que van del Eje Central al Zócalo, pero en el resto son los mismos policías quienes reciben dinero de los líderes.