Domingo 10 de noviembre de 2019, p. 8
Al igual que ocurrió con la cocaína en los años 90, México ha dejado de ser país de paso para el tráfico de fentanilo y sus principales precursores químicos, para ser –además de una de las rutas del trasiego procedente de China– una zona de producción de esta sustancia 100 veces más potente que la heroína, a fin de distribuirlo en territorio nacional y a Estados Unidos.
De acuerdo con información del gabinete de seguridad nacional, en Baja California y Sinaloa ya se han detectado dos laboratorios donde se pretendía producir fentanilo. Según estimaciones oficiales, cada kilo de esta sustancia pura se cotiza en territorio estadunidense en 400 mil dólares, ya que bastan dos miligramos para una cápsula, y una dosis mayor puede causar la muerte.
La Jornada tuvo acceso a una grabación realizada el 3 de octubre durante un encuentro de alto nivel de autoridades mexicanas con representantes de Estados Unidos, entre quienes estuvieron Thomas Alexander y Carlos Martínez, por el Departamento de Defensa; Patrick Ventrell y Heide Fulton, del Departamento de Estado, y el jefe de operaciones de la DEA (agencia antidrogas), Chris Evans, así como varios funcionarios de la embajada.
En esa reunión, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, señaló que a la avalancha de criminalidad que se vive en México, derivada del tráfico de drogas y las disputas entre grupos delictivos, se agrega una auténtica tragedia, que es el fentanilo. México no es productor de la sustencia, pero es una de las rutas de su contrabando, que viene, se empaqueta y una parte se queda en el país; otra parte se va hacia Estados Unidos con las consecuencias trágicas que tiene su consumo
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De acuerdo con información obtenida de integrantes del gabinete de seguridad del gobierno federal, al igual que ocurrió con los grupos delictivos mexicanos a finales de los años 80 y en los 90 del siglo XX, dejaron de ser sólo beneficiarios del traslado de droga hacia Estados Unidos para convertirse en abastecedores de diversos mercados en ese país.
La cocaína que inicialmente sólo era llevada a Estados Unidos comenzó a distribuirse en grandes cantidades en territorio mexicano porque los grupos colombianos comenzaron a pagar a sus socios no con dinero, sino con droga.
A finales de agosto de este año, días antes del encuentro en la Ciudad de México (en el que por parte de México participaron el director del Centro Nacional de Inteligencia, Audomaro Martínez Zapata; el comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio, y el jefe del Estado Mayor de la Marina, Rosendo Escalante), elementos de la DEA fueron trasladados a Sinaloa por efectivos de la Secretaría de Marina para conocer la manera en que operaban cuatro narcolaboratorios (así fue informado oficialmente), pero algunos funcionarios señalaron que había evidencia de que se intentaba procesar fentanilo.
Indicios de consumo
La autoridad nacional señaló en la reunión que “ya hay indicios en algunos estados del consumo de fentanilo. Son muy pocos los casos que se han comprobado de adicción a esta sustancia, lo que nos obliga a fortalecer programas para combatir el consumo.
Se mostró un mapa en el que se describe que el fentanilo llega al país desde China y de India, principalmente a los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas. China es proveedor y trafica a Estados Unidos directamente, también a Canadá y Alaska
, se detalló.
En 2013 tuvimos la primera referencia del fentanilo en México. No sabíamos de esta droga; un elemento de tropa la manipuló y se intoxicó; falleció a los pocos días porque desconocíamos su potencia, que sólo con tener contacto fue suficiente para intoxicar a las personas y una dosis normal de consumo puede ser de un miligramo
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Entrada por Nuevo Laredo
Los funcionarios mexicanos mostraron en un mapa a los estadunidenses los decomisos de cargamentos de la sustancia: Está llegando la materia prima, el fentanilo ya preparado y se introduce. Una parte se va a la frontera más cercana, Nuevo Laredo en Tamaulipas, y la otra sube por toda la ruta del Mar de Cortés
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En el encuentro se informó a los estadunidenses: Tenemos las evidencias de asignamiento de lugares o espacios donde llega el producto y se realiza el proceso de hacer las pastillas o de preparación de fentanilo, en abril de este año en Culiacán. Este tipo de maquinaria es la máxima que hemos incautado hasta el momento, pero no estaban produciendo, porque se localizó en la sierra y sus condiciones no eran las apropiadas
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