Domingo 10 de noviembre de 2019, p. 7
Antes del ataque a las familias LeBarón y Langford en la brecha que comunica Bavispe, Sonora, y Janos, Chihuahua, en ese mismo camino desaparecieron al menos tres personas, presuntamente a manos de criminales, cuando acudían a comprar gasolina a la segunda localidad mencionada, incluida en el decreto de incentivos fiscales para municipios fronterizos, por lo que el combustible se vende a 14 pesos el litro.
Los mormones habitantes de La Mora, en Bavispe, Sonora, compraban gasolina a vendedores de Chihuahua y antes del atentado (en el que murieron tres mujeres y seis niños) denunciaron la presencia de hombres armados en la brecha y amenazas para obligarlos a comprar combustible en Sonora.
En agosto pasado, Julián LeBarón denunció a la prensa local que trabajadores de los mormones que recorrían la vía para comprar víveres y gasolina en Chihuahua eran hostigados por hombres armados y dos desaparecieron, además de otra persona que transportaba gasolina en bidones en una camioneta para venderla en los poblados de Sonora aledaños a Janos, Chihuahua.
Julián LeBarón alertó en ese momento de la presencia de grupos armados en los caminos que comunican el poblado de Pancho Villa, en Janos, con Bacerac en Sonora, y que los criminales cobraban cuota a las personas para permitirles trasladarse.
En declaraciones aparte, Adam Langford, ex alcalde de Bavispe e integrante de la comunidad mormona de La Mora, precisó que en agosto dos trabajadores de los mormones fueron robados y desaparecidos por criminales cuando llevaban 80 mil pesos para comprar gasolina en Janos. En ese entonces Julián LeBarón denunció la inseguridad en la brecha, pero el crimen quedó impune
.
En entrevista a la cadena internacional CNN, Adrián LeBarón, padre de una de las mujeres asesinadas, indicó: “Hace unos meses hubo un incidente, donde hay huachicoleo. A ellos les molesta que uno compra su combustible, porque casi creen que es competencia de ellos, hubo un tipo de amenaza. Y sí recibimos llamadas del crimen organizado de que no andemos de chismosos y que ya no nos iban a molestar, y ahora nos acribillaron a tres familias.
No fue un ataque hacia nosotros, pero no hay confusión; a alguien le están queriendo lanzar un mensaje y utilizaron a nuestra familia
, señaló Adam Langford, al ser entrevistado después del sepelio de Rhonita Langford.