Mexicali, BC., La protesta del domingo pasado contra el gobernador Jaime Bonilla, que le impidió realizar su primer acto como mandatario constitucional en Tijuana, fue organizada por personal de la empresa Ruba y militantes del Partido Acción Nacional (PAN), aseguró el delegado único del gobierno federal en Baja California, Jesús Alejandro Ruiz Uribe.

Añadió que el terreno donde se pretende reubicar a los afectados por derrumbes en la colonia Lomas de Rubí, lo que dio origen a la manifestación, es propiedad del ayuntamiento y desde su origen está destinado a vivienda.

Ruiz Uribe aseguró que entre los manifestantes figuraron Argelia Castillo, administradora del fraccionamiento Verona Residencial, edificado por Ruba, y Sergio Alfredo Acevo, ligado a Juan Manuel Gastélum, ex alcalde panista de Tijuana.

La tarde del domingo, vecinos de Verona Residencial se opusieron a la reubicación de damnificados en esa zona, argumentando escasez de agua y vialidades. La movilización obligó a cancelar un acto en que estaría el gobernador Jaime Bonilla, del partido Morena, quien daría a conocer el Plan de Acción Lomas del Rubí.

Jesús Alejandro Ruiz aseguró que alguien filtró cuándo y dónde se realizaría el acto. Indicó que la empresa Ruba, por conducto de su administradora en Verona Residencial, Argelia Castillo, organizó a vecinos para que se manifestaran contra la reubicación de damnificados en un terreno contiguo.

Acotó que Verona Residencial no ha entregado el fraccionamiento al ayuntamiento de Tijuana porque aún hay obras que no ha concluido, y Ruba engañó a vecinos diciéndoles que ese predio era para una escuela y áreas verdes.

Ruiz Uribe reiteró que ese ofrecimiento es falso, pues el terreno es propiedad del ayuntamiento y su fin es habitacional. Entre otras irregularidades, señaló que la compañía construyó casas en áreas verdes, con la complacencia del gobierno municipal anterior.

En febrero de 2018, unas 200 viviendas de la colonia Lomas del Rubí resultaron afectadas por un desarrollo habitacional aledaño de la constructora Melo. El gobierno de Gastélum acudió a la zona siniestrada y los vecinos le exigieron que se les restituyeran sus casas colapsadas.