Nueva York. Los Vaqueros de Dallas se sobrepusieron a una mala primera mitad y vinieron de atrás para aplastar a domicilio a los Gigantes de Nueva York 37-18 en Monday Night Football de la fecha nueve en la NFL.

El juego no comenzó bien para el mariscal de campo de los Vaqueros, Dak Prescott, quien sufrió una intercepción en su primer intento de pase, que costó tres puntos, pero después completó tres envíos a las diagonales.

Con 2:50 en el reloj antes de irse a medio tiempo, los Gigantes ganaban 12-3, pero la cábala fue parte del partido: un gato negro se coló al terreno de juego y las acciones se interrumpieron por varios minutos, a partir de ese momento, todo cambió para los locales.

En la agonía del segundo cuarto, justo cuando Dallas necesitaba de una jugada grande, Prescott conectó con Blake Jarwin para un avance de 42 yardas hasta la zona de anotación, colocando el marcador 12-10. Los Vaqueros lograron recuperar el ovoide y con apenas unos segundos dieron la vuelta (13-12) con un gol de campo de 52 yardas de Brett Maher.

En el cuarto periodo Prescott envió un pase de anotación de 15 yardas a Michael Gallup y luego otro de 45 a Amari Cooper. A eso se sumaron dos goles de campo más de Maher. La cuenta la cerró Jourdan Lewis, quien en los últimos segundos recuperó un balón perdido por el mariscal de Gigantes, Daniel Jones, y lo regresó hasta la zona de anotación.

Con este triunfo los Vaqueros se colocaron con un récord de 5-3, por lo que se mantienen al frente de la división Este en la Conferencia Nacional, perseguidos por Filadelfia (4-4) y, además, vencieron por sexta ocasión consecutiva a los de Nueva York, que quedaron con temporada perdedora de 2-7.