A dos años del sismo del 19 de septiembre de 2017, que dejó en el abandono al Archivo General de Notarías, la próxima semana los 3 millones de libros que contienen escrituras, actas constitutivas de negocios, testamentos, compraventas, transmisiones o herencias de 1930 a la fecha, estarán reacomodados o apilados.

Los dos acervos y el estacionamiento que ocupa en el inmueble de la colonia Candelaria de los Patos, sin embargo, es insuficiente para albergar todos los hechos jurídicos que se dan en la ciudad, aunque no existe un conteo estricto de documentos en cada libro, por lo que su digitalización es la siguiente fase, que empezará en diciembre, señaló Juan Romero Tenorio.

El director general Jurídico y de Estudios Legislativos de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales precisó que el Acervo B, que resguarda protocolos de 1938 a 2016 y que sufrió el mayor daño durante el terremoto, estará cien por ciento acomodado y permitirá saber qué nos falta y tener una solución administrativa o judicial respecto de la reposición de documentos.

La anterior administración únicamente tuvo un avance de 6 por ciento, al ordenar los instrumentos de 15 de 250 notarías, pese a que el archivo fue cerrado al público un año y medio, pero en estos meses se logró acomodar la información de 214 hasta el año 2012, y falta que lleguen 400 mil libros que están bajo resguardo de los notarios.

▲ Empleados del Archivo General de Notarías han logrado ordenar la mayoría de los 3 millones de libros que contienen todos los documentos jurídicos de la ciudad.Foto La Jornada

Aquí está la escritura original, el documento matriz y la gente puede obtener una copia certificada, aunque no podemos negar que hay hechos delictivos y así como puede circular una copia falsa, puede haber interés de llevarse el libro, por lo cual se requiere un inventario objetivo de lo que tiene este archivo, puntualizó.

Comentó que en el área de apostilla se certifican documentos una vez verificado el notario, el sello y la firma, y de no coincidir se procede a alguna denuncia. Por ello es importante la digitalización de los libros a partir de diciembre en adelante, con la finalidad de que cuenten con un código de seguridad. En este proyecto colabora el Instituto Politécnico Nacional.

Hacia atrás se ve complicado, reconoció, por lo que se resguardarán estos archivos y se les darán las mejores condiciones, dentro de las limitaciones presupuestales del gobierno de la ciudad, por lo cual es importante contar con el apoyo de los diputados, algunos de los cuales recorrieron el lugar para que aprueben una partida para el archivo.

Cientos de libros se encuentran apilados en los dos cuerpos del inmueble, divididos por el paso del Metro, lo cual impide tener columnas más de metro y medio de altura, y entre paredes con salitre, donde decenas de gatos son los encargados de acabar con los roedores y evitar que algún libro sufra un daño irreversible.